Among the Stars - Supercorp AU

Capítulo 14.

Lena's POV

Aterricé en National City a medio día. Busqué mi hotel, y almorcé en el restaurante de éste. Quería llamar a Kara, para saber si en la tarde iríamos a buscar un apartamento para mí. Sin embargo Kara trabajaba en la biblioteca, así que dudaba si llamarla.

Me di una ducha, para estar un poco más fresca, me vestí y sentada en mi cama, marqué el número de teléfono de ella. Repicó dos veces - ¿Bueno? ¿Lena?- dijo con una voz débil.

Me preocupé un poco al escucharla así - ¿Kara? ¿Pasa algo? –me levanté de mi cama y busqué mi bolso, lista para salir directo al apartamento de Kara, sin colgar la llamada.

-No me he sentido bien hoy, Lena, no creo acompañarte, he pasado enferma, vomitando y con mucha pesadez, creo que te tocará ir sola – Podía imaginarme a Kara haciendo un puchero mientras decía esa frase.

-En un rato llego, Kara, dejaremos el apartamento para después –susurré y colgué para ir donde ella. Recordé que Había mandado a Joseph, a hacerme un papeleo para comprarme un auto, entonces tuve que pedir un taxi para ir a un lugar donde rentaban autos. Escogí uno, y de inmediato manejé hacia un restaurante, a comprar sopa, para que Kara pudiera mejorar. Cuando todo estuvo listo, me dirigí al apartamento de la rubia para poder. Subí por el ascensor hasta llegar a su puerta y tocarla – ¡Está abierto! – dijo ella en un volumen de voz lo suficientemente alto para que yo escuchara.

Abrí la puerta despacio, y la observé acostada en el sofá, acurrucada, con una manta encima - ¡Ya vine! Y taje sopa para que te sientas mejor del estómago, pero me gustaría llevarte al médico, para que pueda darte un tratamiento más personalizado-.

Ella palmeó el sofá, a su lado, para que me sentara. –No te preocupes, Le, ya he hablado con mi hermana por teléfono y la verdad es que no he comido bien estos días, creo que hasta me comí algo vencido porque no he ido al supermercado.-

Negué con la cabeza, rechazando su irresponsabilidad porque me preocupaba su salud. Al acercarme, besé su frente y caminé hasta la cocina, que era de concepto abierto hacia la sala, entonces no la perdía de vista. –Ahora tomarás de esta rica sopa y no te vas a negar –dije con una ceja alzada. Ella asintió y me causaba ternura que siempre que hacía esa expresión ella no rechazaba lo que decía.

Serví en un recipiente de vidrio, un poco de sopa y coloqué una cuchara, para que luego ella pudiese tomar, y caminé despacio, para que no se derramara. La puse en la mesa de enfrente y me senté a su lado. –Gracias Lena – dijo ella sonriendo débil, parecía como si realmente algo le hubiese absorbido la energía.

Ella se sentó derecha y yo le acerqué el recipiente para que pudiera comer. Pero se me ocurrió una mejor idea. Tomé la cuchara y empecé a darle sopa despacio – Abre la boca –dije sonriendo y ella así lo hizo, cerrándola cuando le colocaba la sopa en la boca.

Me gustaba atenderla de esa manera, ella era especial y sentía la necesidad de protegerla siempre. Nadie se podría imaginar la ansiedad que sentí por tantos años al no saber dónde se encontraba y no poder asegurarme que ella estuviese bien. No es que pensara que ella era frágil y necesitaba de mi cuidado, pero sentía que necesitaba mi apoyo, cuando había perdido todo.

Terminé de darle la sopa y le pasé una servilleta que había en la mesita del juego de muebles. Ella se limpió con esta y sonrió – Me he sentido como una bebé cuando me alimentabas –dijo riendo y a pesar de todo, se le notaba un poco mejor. -¿Quieres ver una película? -.

-Por supuesto que sí, ¿qué tienes en mente? –Miré como se concentraba apuntando con el control remoto a las películas en Netflix. – Ven- le dije mientras la jalaba un poco a mi cuerpo, para que colocara su cabeza en mi regazo.