Narcissa Militante

Capitulo 7

"¿Qué pasa, Harry?"

"No lo sé. Últimamente he tenido estos sueños inquietantes, donde puedo escuchar una voz silbante que le dice a una serpiente que haga algo, y luego todo se desvanece. No los entiendo. Pero hacen mi cicatriz herir."

Narcissa se movió rápidamente a través de la sala de duelos y se arrodilló para pasar su mano por la frente de Harry. "Déjame ver."

Harry lo hizo, aunque hizo una mueca cuando su mano se deslizó por su frente. Narcissa consideró la cicatriz, la comparó con sus recuerdos de cómo se veía la cosa, y encontró motivo de preocupación. Esto parecía como si hubiera sido infligido de nuevo, con rastros de una costra y sangre seca. Ella asintió y miró a Harry. "Les dijiste a los elfos domésticos que no me dijeran que había sangre en tus sábanas, ¿no?"

Harry se sonrojó y parecía que se alejaría de ella sin ninguna buena razón. Pero Narcissa no era alguien que permitía que sucedieran cosas así. Ella siguió mirándolo y Harry finalmente murmuró: "Debería haber sabido que no podía ocultarte cosas".

"Sí. Y por lo general tienes más sentido común que intentarlo. Así que quiero saber qué fue lo suficientemente diferente sobre esta vez como para hacerte pensar que puedes"

Harry se miró los pies en lugar de responder. Narcissa solo esperó. Estaban en el medio de su sala de entrenamiento, que había ganado más armas y obstáculos para que Harry practicara este verano. No podía mirar a ningún lado que no le recordara a lo que aspiraba, o su mayor destreza en sus habilidades.

Harry finalmente suspiró ruidosamente y murmuró: "No lo haces, pensarás que es estúpido".

"¿Cuándo pensé que una queja era estúpida? ¿O un sueño tuyo?"

Harry miró con más fuerza sus manos, que estaban apretadas juntas. "No te conté sobre la sangre porque esa no fue la única cosa en las sábanas esa noche", dijo con firmeza.

Narcissa arqueó una ceja, luego le dio unas palmaditas en el hombro. "Y eso es solo una parte normal y ordinaria del crecimiento, Harry. Todavía podrías haberme contado sobre ambos. La vergüenza no es un buen rasgo para un asesino. Podríamos dudar en hacer algo que pueda salvar nuestras vidas o alguien la vida de los demás por eso ".

"Oh." Harry dudó. "Todavía no soy un asesino, ¿verdad?"

"Por supuesto que no. No estás entrenado".

Harry tragó ruidosamente. "¿Pero qué pasa si solo quiero usar mis habilidades para proteger a las personas que yo, mis amigos, y no matar a las personas?"

Narcissa sonrió. "Descubrirás que a veces solo puedes hacer eso matando a alguien. O algo. También he enviado criaturas mágicas cuando amenazaban a alguien más y me pagaban". Quizás el diario incluso se consideraría una criatura mágica, aunque Narcissa prefería pensar que eso era simplemente la aspereza de Riddle.

Harry no dijo nada por un rato. Narcissa se acomodó cómodamente sobre sus talones y esperó.

Finalmente, Harry dijo: "Entonces, ¿qué crees que debería hacer sobre la cicatriz y los sueños?"

"Primero escribe a tu padrino. Si es algo de lo que ha oído hablar, me gustaría saberlo". Sirius había prometido investigar las cicatrices de maldición y ver si podía aprender algo sobre las de Harry. Ahora que era oficialmente libre, después de su juicio en el Ministerio, podía obtener acceso a colecciones privadas de libros y bibliotecas de manera más abierta, incluidas colecciones de las que Narcissa, como esposa acusada de Mortífago, sería rechazada.