Narcissa Militante

Capitulo 33

Narcissa Triunfante Parte 2

Narcissa siguió a Moody por la mitad del tren. Podía sentir a la gente murmurando y mirándolos. Narcissa los ignoró eficientemente. Tenía una forma relajada de moverse que hacía que pareciera que su mano no descansaba sobre su varita, y sus ojos se fijaron en el punto preciso del cuerpo de Moody que mostraría el mayor movimiento si él se volviera y le lanzara una maldición. Ella iba a mantenerse a salvo.

Y mantener a sus hijos a salvo, también.

Finalmente llegaron a un compartimento vacío en el otro extremo del tren. Moody la señaló primero a través de la puerta. Narcissa le sonrió y pasó. Ella lo escuchó gruñir por lo bajo, pero él no atacó.

Una buena cosa para él, pensó Narcissa sin hacer nada, y lanzó algunos hechizos de detección en el interior del compartimento. Nada apareció en sus ojos, oídos, nariz u otros sentidos. Se dio la vuelta y vio a Moody deslizar la puerta para cerrarla.

"Sabe por qué quiero hablar con usted, profesor Malfoy".

"No, en realidad. Si me enviaste un búho, se extravió. ¿De qué se trata, Auror Moody?"

Él la miró lo suficiente como para ser un poco desconcertante, luego gruñó y se rascó la cabeza. "Es el profesor Moody ahora, igual que usted. Asumiré el puesto de Defensa Contra las Artes Oscuras este año".

Narcissa asintió y sonrió levemente. "Bueno, entonces. Al menos mis hijos tendrán un instructor calificado en esa materia por una vez".

Moody la miró como si no supiera cómo tomar eso. Luego endureció su mirada y dijo: "Soy consciente de que usaste Artes Oscuras en el pasado".

"Lo sé. La mayoría de las veces me di por vencida, ya sabes. No les sirvo mucho en astronomía. Hay algunos rituales que hago en la privacidad de mi propia casa que todavía los requieren".

"Quise decir en la escuela. Quiero saber por qué harías eso, cuando se supone que debes instruir a nuestros estudiantes. Protegerlos. Mantenerlos a salvo de la oscuridad". Moody inclinó su cuerpo de tal manera que fácilmente podría lastimarla.

Bueno, él podría lastimar a la mujer que parecía ser, la indefensa profesora de astronomía con solo unas pocas O en magia que debía enseñar en lugar de dañar. Narcissa no tenía intención de permitirle golpearla, de sufrir tal humillación, pero por ahora valía más la pena aferrarse a la fachada. Ella dejó que sus ojos se abrieran. "¿Qué les hice a los estudiantes el año pasado? ¡Nadie me dijo que era sospechoso!"

"Lo tuve por boca de alguien que sabe exactamente lo que hiciste", dijo Moody, y su voz era grave de placer. "Ella misma morirá pronto, pero quería que alguien supiera la verdad primero. Alguien que pudiera hacer algo al respecto".

Idunna Narcissa estaba sinceramente sorprendida de que la mujer hubiera vivido hasta el punto de poder contactar a Moody. Bueno, solo su fuerza de voluntad era desalentadora. Narcissa sabía que si no hubiera hecho nada para vengarse de Idunna, la maldición sobre la posición de Defensa la habría golpeado, y ella habría culpado a Narcissa, porque eso era lo que solían hacer las brujas y los magos de la Luz.

"¿Y bien? ¿No vas a reaccionar a la acusación?"

"Hubiera esperado un arresto de un Auror. No solo una acusación".