Ronin

Capitulo 13: Sucesos del pasado y choque de rivales...

"Muy bien clase, no debo de decir lo orgulloso que estoy de todos ustedes" dijo un joven de cabello castaño con una cicatriz sobre su nariz que sonrió con orgullo viendo a los jóvenes de esta generación que ganaron el titulo de genin, Iruka miro a varios de sus alumnos y no pudo evitar ver a alguien que resaltada del grupo de estudiantes.

Era un niño rubio de cabello rubio y ojos azules, era bien conocido en la aldea, siendo este el paria del pueblo, el jinchiruki del Kyubi, hijo mayor de Minato Namikaze y Kushina Uzumaki, siendo estos dos últimos el Yondaime y Gondaime respectivamente de la aldea. El chico fue puesto con ellos luego de ponerlo a prueba de forma individual y ver que estaba al nivel digno de un Genin, si no es que mas.

"…" Naruto permaneció sentado en su asiento tranquilo junto a la ventana, sentía las miradas de varios, su sensei de la academia solo era otro hombre resentido que perdio todo en el ataque del Kyubi hace ya más de cuatro año, desde que fue convertido el jinchiruki sintió el verdadero odio, los shinobis de rango bajo lo despreciaban al igual que los civiles, todo el odio debía de ir a algún lado y para desgracia el era el chivo expiatorio para esto, fue rechazado e incluso atacado.

Se vio obligado a pelear contra los civiles y demás shinobis que atentaban contra el, su madre estaba ocupada con el inesperado cargo de Kage que se vio obligada a tomar, la aldea perdio a un líder que era temido en las cinco naciones elementales, y Kushina era de las pocas Kunoichis de rango S+ que existían, su arte de la espada y Fuinjutsu la izo una persona conocida en todo el continente y digna de tener el titulo de Kage.

Esto trajo consecuencias, como que Naruto sea prácticamente quien crio a su hermana menor, su madre tubo el trabajo de lidiar con levantar una aldea devastada tanto económicamente como militar, se perdido en ese incidente mas del 69% de los shinobis y kunoichis por igual, las zonas de viviendas, comercio y parte de los clases fueron destruidas, esto era un grabe problema y todo cayo sobre los hombros de Kushina que tubo que estar ausente en su hogar.

Naruto tubo que lidiar con el odio de los habitantes de Konoha y el cuidar a su hermana, además de también entrenar y mejorar para en el futuro formar parte de la aldea como un shinobi, muchas noches no pudo dormir y en el día sentía que su cuerpo se caía a pedazos, pero nunca se dejo vencer por estos obstáculos, después de todo era Uzumaki Naruto, único jinchiruki del zorro de las nueve colas.

El proteger a su hermana menor era lo primordial para Naruto, lo que lo llevo a tomar una dura decisión, tomar toda la carga y guardar el secreto de que su hermana menor guardaba una parte del biju de las nueve colas, soportar todo el odio de un pueblo era un preció que estaba dispuesto a tomar con tal de proteger a su hermana menor.

"Uzumaki Naruto…" el chico rubio salió de sus pensamientos cuando fue nombrado para la formación de equipos, "Hado Takashi" el siguiente nombrado fue un adolecente de piel morena y cabello oscuro lacio que llegaba asta su nuca, sus ojos eran grises y extrañamente tenia algunos aspectos que lo asían parecido a un habitante de Kumo, vestía una playera amarilla sin mangas con unas vendas atadas en sus antebrazos, unos pantalones sueltos grises con unas sandalias azules.

"¿El niño genio? Oh mierda" el chico recién nombrado dejo caer su cabeza contra su banco para suspirar, Naruto solo ignoro a su nuevo compañero. De nuevo con Iruka este solo mantuvo la compostura y siguió viendo la lista.

"Y por ultimo Kohara Kimi" ante la ultima nombrada se escucho un grito agudo.

"¡Si~! ¡Naruto-chan estará en mi equipo!" fue el grito de la ultima integrante del equipo que era una chica alta de 13 años de largo cabello blanco como la nieve y piel pálida, tenia unos brillantes ojos azules y una figura curvilínea de reloj de arena que una chica de su edad no debería tener, unos pechos copa C, una cintura estrecha y unas buenas caderas. Vestía un top negro que cubría sus pechos y dejaba al descubierto su estomago, unos calentadores del mismo color que cubrían sus brazos y muñecas, una falda corta oscura que estaba por encima de una red que cubría sus muslos, sin duda una chica hermosa.