12. Mala Intención

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—Hola, veo que vienes a ver, pero no te acercas ¿Te da pena?

Asiente suavemente, sorprendido por la repentina cercanía y conversación de Jimin. El bailarín lo ha notado por días y días solo ahí de pie, con casi la intención de entrar, pero quedado ahí en su lugar y llega a parecerle tierno de vez en cuando. Jungkook permanece quieto y sembrado, sin idea de cómo responder o que decirle. Muerde su labio inferior y Jimin juega con la cinta de su bolso.

— ¿Y tú eres...? —Tienta, considerando que tal vez es demasiado tímido para llevar una conversación.

—Je-Jeon Jungkook.

—Ah, así que eres tú. Me han hablado de ti. Que eres extremadamente perfecto en todo lo que te propones —Tamborilea sus pequeños dedos—. ¿Por qué no entras a mi clase? Podría ser divertido. Me gusta tener muchos estudiantes. —Jungkook hace cierta nota mental a ello, pues Jimin luce demasiado joven. Veinte o veintidós tal vez.

—Es que... No me inscribí.

—Puedes hacerlo tardío. El programa no es rígido como el de pintura o fotografía. A final de cuentas cada quien aprende a bailar a su ritmo y soy especializado en Baile Contemporáneo, sé que aprender a expresarse a través del cuerpo es todo menos sencillo para muchos. —explica con voz calmada y ciertamente pedagógica.

—Tendría que... Pensarlo.

—Bien. Espero verte en el salón, no fuera del salón —Ríe cubriendo su rostro con una mano—. Te veo después. —Despide sacando su celular y avanza

—In-invitarte a... Un café o... Algo así, si quieres, claro. —balbucea tímido. Jimin mira su celular, luego a Jungkook y acaba por asentir con una cordial sonrisa. Guarda su celular y junta las manos tras su espalda, balanceándose en sus pies.

Jungkook lo mira indiscretamente, Jimin no lo toma a mal, considerando que tal vez solo quiere decir algo y no se atreve a hacerlo. Llegan a una pequeña cafetería cercana y Jimin pidió todo lo que quería, Jungkook no ordena nada, solo viéndolo hasta el punto en que puede ser incómodo. Jimin da un sorbo a su café y apoya los brazos en la mesa. Ladea la cabeza y relame sus labios. El otro ya había notado ese montón de gestos en las numerosas veces de quedarse mirando.

—Así que—Suena los labios—. ¿Edición editorial? No pareces alguien que haría eso. Te veo con más cara de... Fotografía y... Dibujo. —Abre los ojos y baja un poco la cabeza ¿Cómo demonios lo supo?

—En realidad ya los hice. —responde quedo y apenado. Jimin ríe, cubre su sonrisa.

—Soy bueno adivinando ese tipo de cosas. —Encoge los hombros. La forma en que se inclina se le hace curiosa. Curvada y que le recuerda a varias niñas de cuando estudió en secundaria.

Aunque claro, para nadie resulta secreto que Jimin es afeminado, un tanto amanerado más no le prestan atención a eso. Esa especie de ceguera selectiva para no juzgar a algunos por ser así mientras a otros se los sataniza por ello. Es casi adorado por quienes lo conocen a pesar de ello.

—E-estaba entre edición y baile, acabe... Tomando el de edición.

— ¿Es porque te dijeron que soy nuevo? Mi curso es el más pequeño en mucho tiempo, todo porque me decían "El profesor nuevo" y tal vez eso ahuyentó a las personas. —Jungkook prefiere no decirle que eso sucedió, tal vez lo haría sentir aun peor.

—No... Es... Expandir oportunidades de trabajo.

—Ah, ya ¿Te dedicas al arte? Yo solo soy profesor en un colegio internacional. Mi inglés es fatal, pero enseño historia, a veces también de educación física y también gramática. Vengo aquí porque tengo un horario muy flexible.

—Si. También me gusta grabar. Hago... Videos a veces.

— ¿De qué tipo?

— Cortos, encargos. —No es mentira, fue una exigencia en el taller de filmografía y le tomó el gusto.

Lo hace si hay un pedido y tener dinero propio. El dinero de Yoongi es de Yoongi y aunque le da una parte porque sale, no le gusta usarlo. Es dinero de Yoongi.

—Podría pedirte uno para que me ayudes con mis clases. —bromea.

—No tengo problema.

Puede decirse que la conversación fluye. Jungkook no dice casi nada, pero continúa fluyendo gracias al parloteo continuo de Jimin. Él permanece en sepulcral silencio, admirando cada pequeño gesto del pelirosa. La forma en que habla, como se mueve, como se ríe, guiña los ojos, muerde sus labios y acaba en tenerlos húmedos, enrojecidos y un tanto hinchados.

¿Cómo serían en otras situaciones? Su mente empieza a volar lejos, imagina mil situaciones, mil posibilidades distintas.

Rozar esos labios, hundir los suyos, morderlos; sentirlos contra su piel en besos sueltos por su cuello o pecho. Exhala con apenas discreción, la lengua igual de roza en torno a su falo y-

—Eres muy lindo. —Se le escapa cuando Jimin bebe lo poco que le queda de su enorme taza de café.

—Jou, gracias, tú también eres muy lindo—La camarera recoge lo que hay en la mesa—. Bien, me tengo que ir, debo encontrarme con un amigo. Me gustó mucho hablar contigo Jungkook. Nos vemos otro día. —Anuncia tomando su bolso. Despide con un suave gesto de mano y un beso juguetón. Jungkook paga un rato después, embobado en la última imagen que no para de repetirse cual GIF en su cabeza.

Yoongi está muy extrañado de recibir a Jungkook casi botando baba apenas llega a casa. Resulta ligeramente favorecedor en sus temas laborales.no deja de ser muy extraño pues nada lo pone así. Nada excepto él haciendo cualquier cosa. Cualquier-cosa. De la forma más literal que nadie puede imaginarse.

— ¿Que tienes? —pregunta con una ceja alzada. Jungkook queda estirado en el sofá, con la cabeza en el posa brazos y una de las piernas en el suelo.

—Es que pasó algo que me gustó mucho. —dice en ronroneos complacidos.

— ¿Qué cosa exactamente? Empiezas a espantarme. —Admite cruzado de brazos con gran disgusto.

—Solo fue bonito... Ojalá fuese más. Me gustaría que también estuvieras ahí. —Prosigue, sin explicar nada realmente. Yoongi prefiere no insistir, pues Jungkook no es precisamente comunicativo cuando se trata de estar en su luna tan particular.

—Mientras no involucre traer un animal para eso supongo que no me importa. —Concluye sin interés al respecto. Jungkook ríe aun estirado en el sofá.

Se pregunta cómo sería Yoongi conociendo a Jimin. Sería de lo más lindo que ambos estuvieran juntos... Se tocaran...

—Jungkook deja de parecer un maldito perro y anda a limpiarte la baba.

— ¿No prefieres meterlo aquí dentro y aprovecharla?

—No.

—Que lastima, hoy tengo las ganas... —musita con un ligero puchero desilusionado. Tal vez está volando demasiado alto con respecto a sus fantasías.

¿Cómo evitarlo? Cree que sería fenomenal tener a Jimin y Yoongi al mismo tiempo atendiéndolo. Incluso puede que Yoongi pensara lo mismo al conocerlo: Jimin y Jungkook para satisfacerlo.

Yoongi se rinde totalmente con el tema de la baba, sin dejar de parecerle tremendamente asqueroso.


Sick or Fake || YoonMinKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora