Sick or Fake || YoonMinKook

33. Advertencia de lo Próximo

—Que ordenado tienen todo.

Realmente lo sorprende lo sistemático que es el tema sexo. En un principio creyó que sería mucho más simple y hasta patético. Por el contrario, las cámaras están muy bien colocadas; de calidad perfecta, luces; micrófonos; juguetes al alcance, una cama grande, espejos en algunos muros y una computadora en un elaborado y gran escritorio limpio.

Excesivamente limpio. Por lo baboso que es Jungkook debe ser porque lo babeó hace poco con alguna asquerosidad. Con la idea de que ahí siguen sus fotos decide encenderla para borrarlas. Ya las vieron lo suficientemente y como Yoongi dijo ya no tendrían modo de obtenerlas de nuevo. Satisfecho con lo que hace está dispuesto a volver a salir del cuarto y cerrarlo como lo encontró.

En su torpeza natural, sin haberse dado cuenta del táctil de la pantalla abre una ventana de enlace directo. Parpadea repetidamente un tanto espantado por verse junto a una ventana de chat.

—Ahora como lo apago—murmura. No tiene idea de ese capturador. Entre comillas debería bastar con darle a cerrar para que esté bien—. Esta cosa marca última sesión o algo así. —interroga pensativo, entrecerrando los ojos.

G-Dragon: EH!
AHÍ ESTÁ
YA LO TIENEN Y LOS MUY ESTAFADORES SE LO GUARDAN
M&S: Ya sabíamos que lo tenían, la diferencia es que ahora se ve un poco más sano
HW: Tan fibroso como se necesita.
RM: me pregunto si ustedes no hacen nada más con su vida que estar aquí...
Woo: Que tierno, no entiende nada.

¿Que por qué lee la conversación? Buena pregunta, tal vez porque trata directamente de él, estás personas están notablemente emocionadas y hay un aviso de que hay un pago. Cuenta cada uno hasta llegar a la cifra de noventa y seis personas, continúan, una cifra gigante de muchos ceros en ella. Por descarte asume que Namjoon es RM, considerando que es quien abre una ventana privada.

RM: desactiva la cámara antes de que digas algo que te vaya en contra. Si la desconectas vas a salir offline de la página.

Sigue la instrucción, cuidando de no mover o desconfigurar el aparato. Una vez así la ventana se cierra y queda aquella única.

RM: Bien, no eres un cavernícola.
Yo: Eres Namjoon ¿Cierto?
RM: acertaste.
Yo: ¿Vas a dejar a Hoseok?
RM: No.
Yo: ¿Por qué te lo llevaste? Ni siquiera sabías de su existencia ¿De que te sirve?
RM: Me gusto, es todo y así de simple.
Yo: ¿Por qué les gusta lastimar a gente que ni siquiera conocen? Son demasiado extraños aún en sus términos. Lo disfrutan.
RM: Es una cualidad innata de ser marginales, atraer a otros a que sean iguales. Lástima que hice un trato con Yoongi para no llevarte sería tierno tenerte aquí. Tengo a otra persona a la que creo que te pareces. Sería como particular incesto.
Yo: ¿Hay algo de lo que hagan que no sea potencialmente ilegal o extraño? Parece que lo hacen a propósito. No hace falta ser tan lanzados a eso.
RM: ¿Te hace sentir mejor que al menos yo y Yoongi no tengamos la maña de buscar niños de dieciocho para abajo?
Yo: Quisiera decir que sí, pero igual me preocupa.
RM: Tranquilo, no soy Quimbly y tu Lolita. Tienes buena edad y solo por eso acepté ayudar. Ya con G-Dragon, TOP, HW, Woo y algunos más por ahí les vale mierda que edad tenga. Si les gusta, les gusta y a hacerlo hasta que ya no pueda más o les aburra.
Yo: ¿Hoseok te va a aburrir?
RM: Quien sabe, quizá sí, esperemos que sea antes de que deba ir obligatoriamente al manicomio como mis otros pasados cinco compañeros ♥
RM: tengo una maña terrible de romperlo todo, quién sabe si él acabe igual tal vez sí, tal vez, todo dependerá de qué tan mánico depresivo me ponga.
Yo: ¿Eres Bipolar?
RM: Ah, sí, acabo de salir de un episodio. Es un fastidio, hago muchas cosas tontas.
RM: [Foto]

Jimin arruga la cara ante la foto que envía, es él mismo mostrando la muñeca llena de cortes. Asume que no siempre es echarse en un lugar a pensar en lo miserable y triste que se siente. Automáticamente se abre una especie de cámara de video llamada donde Namjoon acomoda un poco su suéter antes de levantarse.

—Vienen de repente aun con la medicación. Supongo que estaría muerto de no tomar el medicamento y lo mismo para ellos. Saluden.

—Hola quien quiera que seas —saluda Jin con una mano, teniendo en la otra a uno de los Sugar Glitters. El de hombros anchos se levanta y aparta un poco la sabana para dejar a Hoseok visible—. Hey, saluda, no sé quién es, pero saluda. —indica dándole toques insistentes en tanto que le sale una risa de aire travieso. Hoseok gira un poco en la cama.

—Hola. —balbucea con voz ronca y la cara hinchada. Jimin distingue que tiene el cuello totalmente morado. Considerando lo grandes que son las manos de Namjoon lo sorprende que haya sido un arranque.

—Es Jimin, que poco lo quieres—bromea Namjoon, Hoseok muy apenas se remueve más, queriendo hacer más, pero demasiado dolorido para lograrlo—. Está vivo si eso es lo que te preocupa. Tiene buena coagulación—Le toma del brazo y muestra los cortes que hay en este—. Dependiendo de cómo se comporten los dejaré hablarse por celular... de todos modos se verán pronto. Cuando vaya por ti. Hasta entonces. Come, duerme, caga, todo antes de que quieran empezar. Una pequeña sugerencia.

Y se corta. Jimin apaga la computadora después, con cuidado de notar nada más que pudiera ser molesto para el par. O para Yoongi. Jungkook muy rara vez toca esa computadora. Tiene la suya propia en otra habitación. Exhala sin ganas, estirando las piernas en dónde está. Balancea los pies. Ya ha intentado irse, contactar, de todo y no hay opción.

Literalmente está encerrado cual perro.

Vuelve a la que es su habitación, con paredes pintadas por Jungkook en su obsesiva manía por cumplir sus caprichos. En broma le había dicho que lo quería lleno de árboles monocromáticos y aves volando.

Lo cumplió apenas una semana después. Tan perfectamente hecho que da miedo.

— ¡Jimin-ssi! —Se sobresalta por la aparición escandalosa y repentina de Jungkook—. Te compré esto ¿Te gusta? Lo vi muy bonito y creí que te gustara. También esto y esto, esto porque seguro quedaría bien con esto otro y...

Lo deja seguir hablando en tanto que recibe lo que le entrega en manos. Lo primero había sido un grueso y lindo gorro blanco. Parecería un niño usándolo seguramente. Yoongi se recuesta de la puerta, viéndolos interactuar y Jungkook consumir sus ganas y buena intención. Mira su reloj.

—Deberíamos comer, más tarde vamos al cuarto.

— ¿Vamos? —Jimin tartamudea al mismo tiempo que Jungkook lo abraza con fuerza, juntando su mejilla con la del bailarín.

— ¡Si! ¡Ya tenemos todo listo! Genial ¿No? —Lo toma del rostro y de aun montón de besos a los labios de Jimin—. Va a ser tu primera vez.

—Pe-

— ¡Y Yoongi me dijo que podía ir yo primero!

Jungkook ladea la cabeza, con aquella mueca feliz aun plasmada ¿Por qué Jimin luce tan asustado y a poco de llorar?