47

71.5K 6.4K 730
                                    

Así que acá estoy. Me siento un poco extraña por estar usando una de las batas de Fetish nuevamente y estoy un tanto ansiosa... o nerviosa, no lo sé.

Luego de que Killian me dejara claro que soy un desastre en eso de jugar a ser la ama —aunque ni siquiera lo había intentado— llamé a Peter y le dije que volvería a grabar. ¿Así empezamos todo, no? Él dominando todo y yo nerviosa, pero esto es muy diferente.

No puedo imaginar cómo será grabar con Killian ahora que tenemos la relación que tenemos. Quiero decir, tenemos un perro en común — aunque él no quiera admitir que ama a Gokú — y todo lo que pasamos... ¿Eso podría afectar de alguna forma lo que se ve en la pantalla?

¿Tenemos la misma tensión sexual que antes? ¿Más, menos? ¿Podré ser Penny y no Isla?

—Isla, Peter ya quiere que entremos—Killian pone una mano en mi cadera y me mira—¿Está todo bien?

—si, solo estaba pensando—le sonrío y ambos entramos al cuarto ambientado como mazmorra, que odio. En realidad, me parece un decorado demasiado tétrico como para follar ahí, pero bueno. Al parecer, el sexo en las cavernas le gusta a varias personas. A millones, si nos guiamos por las visitas en los vídeos.

—¿En qué? —mientras hablamos, Killian se encarga de preparar las cosas y no puedo evitar sentir un revuelo en el estómago cuando veo un látigo entre todo eso.

—¿Esto fue tu idea?—agarro la tela casi inexistente de látex que estoy usando para cubrir mis pechos y mi coño por debajo de la bata y él sonríe—ya me has respondido.—¿Qué vas a hacer con eso?—lo miro con una ceja arqueada cuando se acerca con un rollo de soga.

—atarte.

—y lo dices como si fuera la lista del súper— —me saco la bata y él pasa la soga alrededor de mis muñecas. Luego da un montón de vueltas alrededor de mi cuerpo con la soga, haciendo nudos que creo imposibles de desatar. Killian me agarra las mejillas con su mano y me da un beso bastante profundo que no puedo evitar responder de igual forma.

—voy a colgarte.

—¿Qué? Killian, no... ¿La soga va a aguantar?

—¿Confías en mí?—él sostiene mi mentón y no deja que mi mirada se escape de la suya—Isla, ¿Confías en mí? — repite.

—si, confío en ti, pero no en la soga.

—te prometo que no va a pasarte nada—Killian me da otro beso antes de ponerme boca abajo en el suelo. Al no poder usar mis manos, mis pecho están aplastados contra el concreto y bufo. Luego escucho que algo hace clic y mi cuerpo comienza a alejarse del suelo. Realmente está colgandome del techo. No puedo mover mi cuello al ángulo necesario, pero debe haber alguna polea o algo que me sostenga. Toda mi anatomía está suspendida en el aire y si miro hacia abajo, estoy más de un metro y medio del suelo. No escucho a Kiĺlian y no soy capaz de moverme ni un centímetro puesto que tengo terror de caerme.

De pronto, Killian está parado frente a mí y levanta un poco mis ojos para que lo mire, aunque se inclina.

—necesito que te relajes antes de que empecemos.

—estoy suspendida en el aire, Killian, me aterra un poco que ni siquiera pueda frenar la caída.

Killian hace que mi cuerpo gire y me hace ver un montón de sogas atadas y sostenidas a la pared.

—no hay forma de que te caigas, ¿Sí? Confía en mí—Killian me pasa la mano por el cabello—además, no me alejaré, estaré lo suficientemente cerca como para sostenerte si algo se afloja.

—prometelo.

—¿Alguna vez te he fallado? —niego—entonces no deberías preocuparte— Killian se aleja un poco y se pone detrás de mí—Isla.

Fuera del set #1Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt