Dark Side |HS|

Capítulo 23: ¿Porqué él?

                                    Capítulo 23

                                  ¿Porqué él?

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Regresé a mi cuarto, sin importar que no le hubiese preguntado a mi madre si había notado alguna presencia en mi habitación. Uno de los motivos por los que no lo hice era porque acababa de hacer las paces con ella, quería tener un buen inicio de reconciliación y no añadirle más preocupaciones. Otro motivo es mi recién cabreo provocado por la estúpida de mi hermana. Cuando tenga la oportunidad tal vez le cierre la puerta en la cara o accidentalmente mi puño conecte con su cara. Me siento sobre la cama sin saber que hacer, aún es muy temprano para cualquier actividad que requiera esfuerzo,  mover un dedo una de ellas. Opto por tumbarme en la cama y pasar un rato escuchando música.  Hace mucho que no hago esto,  hace mucho que no me dedico un tiempo a mí misma para estar tranquila y desconectar. La música es el mejor remedio para perderse en los pensamientos de uno mismo.

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Al enchufar los auriculares selecciono el modo aleatorio y la primera canción en sonar es "Monster". No sé si reír o llorar ante tal coincidencia.

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I'm friends with the monster that's under my bed.

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Es irónico que de pequeña le temiese al monstruo que supuestamente habitaba debajo de mi cama y ahora pasase la mayor parte de mi tiempo con uno de ellos aun que hay seres peores que los arphoniste... Los seres humanos. Estos son los únicos capaces de destruirse tanto física como psicológicamente entre ellos aún teniendo el poder de la mediación. Pudiendo usar sus ya inservibles cerebros prefieren ignorarlo o hacerlos servir para el mal. Son los únicos seres que no son crueles por naturaleza, los únicos que son crueles por el mal ejemplo que se da, haciendo de nuestra sociedad cada día peor. Esos, esos son verdaderos monstruos.

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Después de recitar mi discurso triunfal escucho un aplauso colectivo en mi mente. Por muy falso que sea el aplauso, mis palabras me enorgullecen.

Todo esto me recuerda a la primera visión que tuve que tuve, la cual me hizo llegar a la misma conclusión.

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Flashback.

- No nos tengas miedo, también somos humanos. - dijo una voz proveniente de un niño.

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Quería reír por no llorar, ellos no eran humanos y tal vez nunca lo serían. Me fijé en una joven y sentí que la conocía. No estaba equivocada, esa joven era yo. Ella me miró y al poner en contacto sus negros ojos con los míos sonrió, sonrió de la peor forma que exístia.

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- No dejes que te cojan. No dejes que él te coja si no quieres acabar así - dijo mi yo del espejo.

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Quería hablar, quería preguntarle quién era él en específico pero mi voz no salía de mí, no encontraba mi voz, era como si se hubiese desaparecido.

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- Los monstruos son reales, los fantasmas también.- dijo con los ojos cerrados - Ellos viven en nuestro interior y a veces ganan. - tras finalizar la frase abrió sus ojos de nuevo.

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Y entonces comprendí todo, ésto era un aviso, no era real. La razón por la que no debía entregarme a mí o al colgante a los arphoniste no la sabía, pero sí sabía que si lo hacía ellos acabarían con toda mi pureza interior, de alguna forma o otra extraerían esta parte de mí - la humana - para dejar paso a la monstruosa. Para convertirme en un ser que no quiero ser, porqué alguien sin su parte consiente y humana es monstruo, alguien que no tiene la capacidad de sentir ciertos sentimientos, alguien que no sabe distinguir el bien del mal no es humano. En este momento es cuando me doy cuenta de algo importante que había pasado por alto, algo en lo que antes no había pensado, todos los monstruos son humanos.