En mi oasis siempre hay Luna llena (Spin-off. Fauces II)

19. Me jala hacia ti

Me pregunto cuánto daño le he hecho a mis hermanos, no, en realidad no es que yo les haya hecho daño, es mi situación, mi pasado. Ellos no solían contenerse con nada, guardar silencio iba en contra de su naturaleza, en contra de todo lo que eran y representaban y ahora lo hacían por mí. Para no herir mis sentimientos. Habían entrado a los trece años, comenzaban a preguntarse lo que sería tener pareja, cómo se sentiría enamorarse de su destino, pero guardaban silencio, como ahora. Es triste para mí, porque el momento me enrostra sus palabras calladas, se vuelve evidente.

―El tío Carter tiene novio ―Atlas mira su teléfono distraído. Estamos en el salón, papá había querido mirar una película de autos de carreras o algo así pero no estábamos prestando tanta atención. Papá y dada estaban en uno de los sillones individuales, dada sobre las piernas de su alfa, de lado, Atlas, Themis, Jun y yo estábamos en el sillón de tres cuerpos apretujados, Jun con el brazo pasado por mi hombro mientras yo descansaba la cabeza en él y acariciaba su mano. En la tv se veían imágenes de automóviles pasando de un edificio a otro.

―¿Seguro? ―pensaba en el hombre que había conocido un poco más cuando lo había visitado, en las ocasiones en que se había escondido con nosotros por los rumores, no me parecía probable que estuviera con alguien si no era serio y no le creía demasiado a las revistas o noticieros de chismes― ¿No será un rumor? ―se encogió de hombros.

―No sé, dice: Carter Nox ha sido visto por tercera vez con un hombre desconocido. Creemos que es el mismo afortunado con que lo vimos antes en la playa, un restaurante y, ahora, de compras en el mercado ―termina de leer―, no se ve bien quién es, pero sí parece ser la misma persona en todas las fotos ―me da curiosidad y a dada también, papá no está tan interesado porque mira la película aún fascinado por la persecución vehicular.

―A ver ―me estira su teléfono y achico los ojos, mostrándole también a Jun que se inclina para ver conmigo y pone su cabeza junto a la mía, su mejilla acaricia mi rostro, su compañía se siente natural y, al mismo tiempo, altera mi pulso, acelerándolo, pero me concentro en la fotografía para distraerme de la sangre que corre ahora con más impulso por mi cuerpo.

―Con un buen software de reconocimiento podríamos identificar parte de sus facciones y tal vez descubrir su identidad ―comenta aunque, como no conoce a Carter, no está realmente interesado (aunque sí hemos visto algunas de sus películas)―. Parece la misma persona en todas las fotos, es verdad ―y así era, se veían solo de espalda pero se notaba que era Carter por su espalda y otros detalles, el que estaba a su lado también era alto, aunque no tanto como él. Si había encontrado a alguien me alegraba por él, pero había algo extrañamente familiar en esa silueta, traté de hacer zoom en la imagen borrosa donde se veía un costado del rostro del hombre misterioso―. Parece oriental... ―el comentario de Jun me hizo darme cuenta.

―Es el tío Tooru ―alcé las cejas impresionado cuando me di cuenta. Papá ahora sí le puso pausa a la película, frunciendo el ceño y estiró la mano hacia mí.

―¿Hablas en serio? ―miré la imagen una vez más antes de estirarle el teléfono a él que comenzó a analizar la foto con dada, ambos igual de impresionados.

―Creo que sí, parece él ―estoy muy sorprendido, Themis se une al chisme y va hasta el sillón de nuestros padres a mirar la imagen.

―¿Cómo se conocieron si quiera? ―pensé en mi tiempo en Orville.

―Pues, luego de que me hice el tratamiento con él, no se vieron ni nada, pero sí le di la tarjeta del tio Tooru a Carter y él dijo que llamaría ―era tan extraño.

―Pero son dos alfas... ―Atlas también quería volver a mirar la imagen ahora que el posible romance había sido identificado.

―Eso a Carter nunca le ha importado... ―el susurro de dada se me hizo bastante curioso, como si hubiese motivos para este.