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- JiMin... -

Era la quinta vez que María tocaba la puerta de la habitación del YoonMin y es que no escuchaba a nadie.

Según YoonGi, JiMin estaría listo a las 2:30 PM para reunirse en la piscina con los demás chiquillos.

- JiMin Voy a entrar -

Dijo María ya cansada de esperar.

- Ya voy María -

Escucho que por fin JiMin le respondía.

- Que milagro que contestes -

Respondió María poniendo los ojos en blanco.

Unos minutos más pasaron y de la habitación salió un JiMin con shorts cortos blancos, una camiseta holgada azul con rayas blancas y un lindo sombrero para el sol.

- Lamentó la tardanza, No encontraba una camisa de YoonGi que me quedara bonita -

María volvió a poner los ojos en blanco.

- Deberías saber que te prefiere sin ropa y en cuatro -

Dijo comenzando a cambiar con el menor siguiéndola.

- Oye... No es del todo cierto -

Respondió el menor, pero aun así tenía las mejillas rojas por la vergüenza.

- Dejemos está discusión para otro momento, ahora vamos que los demás te están esperando -

JiMin asintió y siguió a María rumbo la piscina de la gran casa.

Al llegar no pudo ocultar su gran sonrisa al ver a su primo y a los otros dos chicos allí.

Los tres estaban sentados en una mesa, con una gran sombrilla cubriendo los del sol, en la mesa había una jarra de limonada, había galletas, fruta picada y un tarro de gomitas.

- ¡Holaaaa! -

Dijo con emoción al llegar junto a ellos.

- Hola, ¿Como estás? -

Le preguntó TaeHyung.

- Preséntense entre ustedes y platiquen todo lo que quieran, yo estaré en esa hamaca de allí bajo el árbol de mango leyendo, nada de travesuras -

Dijo María para ir donde mencionó, no sin antes darles una mirada de advertencia.

Jackson y JiMin se miraron, no sabían que hacer, nadie allí sabía que eran familia, así como se supone que no se conocen.

¿Qué pasaría si alguien se enterará?

// Casino D'Town Madrid España //

- Exijo hablar con Agust'D -

Dijo el hombre que se encontraba amarrado en la silla y con sangre seca por el rostro y brazos.

- No lo veo posible -

Respondió una mujer de cabellos rojizos y tez blanca.

- Yo prometí pagarles, ¿Porque se llevaron a mi hijo y a su primo? -

Preguntó el hombre, puesto que estaba muy agotado como para gritar.

- Porque así son las cosas en estos negocios -

- ERES UNA MALDITA PERRA -

gritó el hombre con frustración.

- Seré una perra, pero no la tuya cariño -

La mujer dijo eso con cinismo y abofeteó al hombre.

- Sabes algo más, aquí las pequeñas perras serán tus niños, muy bien que el jefe les debe partir el culo y estoy segura de que ellos pedirán más -

La mujer retoco su labial y finalmente salió de la habitación de "seguridad" del casino y llamo a alguien.

- Esos primitos te traerán problemas -

Dijo y corto.

ESTOCOLMO © ANÁNKE #10 YOONMINOnde as histórias ganham vida. Descobre agora