57

949 98 1
                                    

Más de 18 horas de vuelo habían pasado y por fin estaban todos en el Amazonas nuevamente.

El Funeral de María sería al día siguiente, cuando todos estuvieran mejor, ya que ahora estaban hechos un desastre, necesitaban tomar una ducha y dormir plácidamente.

- Mañana tenemos misa y vamos a enterrar a María en el cementerio familiar -

Informo YoonGi antes de dejar ir a todos a sus respectivos dormitorios.

- ¿Algodóncito estás bien? -

El mayor estaba caminando detrás del menor, que se movía lentamente por la casa.

- Ella trato de salvarme -

Dijo entrando en la habitación.

- ¿Estamos hablando de María? -

Él peli rosa asintió y tomo una almohada para abrazarla.

- Hyung~ yo realmente la quería -

El mejor hundió su cara contra la almohada.

YoonGi quien había dejado las maletas junto al armario y se había estado cambiado la ropa por algo cómodo para dormir sonrió.

- Eres un bebé y ella también te quería mucho, por ello trato de salvarte, solo que las cosas no salieron como ella lo planeo -

YoonGi tomo algo cómodo para el menor y se lo arrojó al torso.

- Cámbiate, así te daré mimos -

JiMin como todo un niño hizo caso y al terminar llamo a su Hyung para que cumpliera con lo acordado.

- Hyung... Hyung... HYUNGCITO ~ -

YoonGi que venía con dos vasos de agua miró al menor y le sonrió.

- Ya llegué algodóncito -

JiMin asintió y espero a que el mayor fuera hasta el, dejado los vasos de agua en las mesitas de noche.

El mayor se acomodó en la cama y el menos instantáneamente se acercó a él.

- Lo extrañe muy YoonGi Hyung -

Min sonrió y comenzó a acariciar la espalda del menos mientras lo abrazaba.

- También te extrañé, sinceramente casi pierdo la cordura sin ti y es que ver cómo te trataban me hizo enojar mucho, no me gusta que te hagan daño cariño. -

YoonGi hablo mientras veía como el chico entre sus brazos sonreía, sus ojitos brillaban con emoción pura y sus mejillas estaban rosaditas, se veía tan inocente y dulce.

JiMin miro a si Hyung y sonrió pura paz y tranquilidad, a la misma vez que una adrenalina y unas ganas de que lo tomara fuertemente.

Así que él menor se subido sobre si Hyung u lo beso dulcemente, el beso fue subiendo de tono poco a poco.

Las manos de YoonGi que en un inicio estaban en la cintura de JiMin, ahora se encontraban tocando descaradamente el trasero bien formado del menor.

- JiMin, tenemos que hablar... yo ya no te quiero solo para esto -

JiMin lo miró confundido, ¿Ya no lo quería?, ¿Hizo algo mal? Miles de preguntas vinieron a su cabeza, pero todas desaparecieron cuando dijo.

- Como mi pareja tienes libertad, bueno más o menos, te voy a poner un rastreador, estarás siempre vigilado, no quiero que nadie te haga daño y bueno, creo que es momento de que borres tu antigua cuenta, porque eso sí, no quiero que nadie más se acerque a ti o vea tu cuerpo si no soy yo -

La voz de YoonGi era ronca y denotaba que realmente le daban celos de solo pensarlo.

- ¿Me amas? -

La voz de JiMin interrumpió el silencio incómodo.

- Sinceramente no es amor, es un trauma, porque no te puedo sacar de mi cabeza, no puedo pensar en que alguien más te vea, te toque o te haga lo que yo te hago, Park JiMin no te amo, yo estoy traumado contigo y es lo más hermoso que me ha pasado -

Dijo el pelinegro acariciando el suave cabello del menor.

- Entonces yo también estoy muy traumado de ti Hyungcito -

Dijo el menor sonriendo, se inclinó sobre YoonGi hablo besos suavemente y con todo el "trauma" que sentía hacía el contrario.

- Hoy solo quiero abrazarte, mañana después de dejar a María en el cementerio hablaremos de muchas cosas, como tú futuro y el de los demás -

JiMin asintió y se acomodó sobre YoonGi, dejando se cabeza en el pecho del mayor.

- ¿Puedo dormir aquí? -

YoonGi besos su frente y le dijo que si, dejando así ese bonito momento en sus corazones traumados.

ESTOCOLMO © ANÁNKE #10 YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora