Capítulo 34: Penúltimo

1.7K 198 85
                                    

"Me abrazaría al diablo sin dudarPor ver tu cara al escucharme hablarEres todo lo que más quieroPero te pierdo en mis silencios"

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

"Me abrazaría al diablo sin dudar
Por ver tu cara al escucharme hablar
Eres todo lo que más quiero
Pero te pierdo en mis silencios"

- La Oreja de Van Gogh

Una vez que las cadenas cayeron, que nos soltamos y estuvimos libres, no podía evitar estar en alerta, sentía como si hubiera un cable conectado a mi cuerpo recargándome de energía...

— ¿Qué sigue? — pregunté enérgico echándole una mirada a la puerta esperando que en cualquier momento se abriera de par en par y comenzar a dar pelea.

— Que vengan —

— O podemos ir por ellos — sugerí, si habías podido abrir el grillete obviamente podías con la cerradura de la pequeña puerta.

— O nos ven salir, preparan un arma y cuando queremos acordar tenemos tres cadenas más — te eché una mirada y dejé de opinar, era mejor seguirte en esto a ti, evidentemente sabías qué hacer y tal vez mis ideas nos llevaban por mal camino — no seas ansioso, hay que esperar y saber usar la ventaja — asentí volviendo a tomar asiento.

— Luces tan acostumbrada a esto...— murmuré por lo bajo, sabía que me habías escuchado pero fue un comentario que no pude evitar hacer.

— Llevo un par de años haciendo esto — dijiste con pesar, lo que me dejó curiosidad y me llevó a preguntar lo siguiente:

— ¿Cómo comenzó todo? —

— Cuando salí del orfanato, no quería aceptar que mi vida se iría apagando poco a poco y no pudiera hacer nada, no era como si me estuviera muriendo pero ¿Qué sentido tiene vivir sin sentir? Conocí a un chico... No, en realidad no lo conocía, solo quise probar, probarme a mí misma que podía sentir todo lo que sentía una persona normal, pero fallé y él en venganza mató a mi hermano...— me sorprendí

— ¿¡Tenías un hermano!? — una leve sonrisa, un tanto melancólica y fugaz surcó por tus labios.

— Lo conocí en el orfanato, yo era más grande que él por un mes, lo conocí cuando tenía cinco casi seis años, los demás niños creían que estaba poseída así que cuando lo atacaron a él fue fácil asustarlos y ayudarlo...— asentí alentándote a continuar, sin embargo te mordiste los labios y bajaste la mirada — en realidad no lo quise ayudar, me obstruía el paso a los dormitorios, a partir de allí comenzó a seguirme a todos lados y con el tiempo me acostumbré a él — okay, eso se escuchaba más a ti.

— ¿Por qué lo mató? —

— Porque dijo que si estaba buscando sentir, él lo haría por mí, se sintió dolido porque no lo amaba y en venganza lo mató a él —

¡Maldito cretino!

 — Y ¿Qué pasó luego? — por nada del mundo quería que dejaras de hablar, de contarme de ti. Porque de esta forma te conocía un poco más, solo un poco.

Bajo Llave | Jeon JungkookWhere stories live. Discover now