Capítulo: XXXIII

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Teníamos unas cuantas preguntas y cero respuestas. Sesshomaru estába tan distante, odiaba que siempre me dejará fuera de lo que sea que estuviera pensando o haciendo ¡por Dios! No era una niña, también podía ayudar, quería estar junto él.

Las semanas pasaron y algo que jamás imaginé ocurrió. Levantarme en la mañana nunca fue tan lamentable.

-Buenos días Kanna- Salude aún adormilada.

- Buenos días señorita - Kanna me servía una taza de café calentito. Camine hasta uno de los mesones y encendí la pequeña tv que se encontrar ahí.

-Señorita el correo- Kanna me entrego un conjunto de sobre, que comense a revisar. Unas cuantas factura e invitaciones a eventos etc, se encontraban, pero hubo una que captó mi total atención.

"Para la señorita: Kagome Saito Higurashi"

Algo se revolvió dentro de mi. Abrí el sobre y me dispuse a leer el contenido.
Era una pequeña tarjeta color rojo con letras doradas.

"La señorita Misae Sara y el Señor Taisho Sesshomaru. Tenemos el honor de invitarla a nuestra unión en matrimonio, estaremos agradecidos por su asistencia

Lugar: " Hotel Park Hyatt Tokyo
Hora: 10 am"

"¿Qué está pasando? No entendía nada ¿Por qué? "

-Senorita...- músito Kanna señalando la tv, y en esta la gota que derramó el vaso. Las cámaras enfocaban a una muy bien conocida pareja.

- Si, ya hemos enviados las invitaciones dentro de dos días nos unimos en matrimonio- Sara sonreía junto a Sesshomaru, mientra anunciaba la notícia, que podía confirmar con aquella invitación en mis manos. Mi vista se nublo y me sumi por completo en una oscuridad.

No se cuanto tiempo pasó, pero desperté en mi habitación, sobre mi cama, mientras Kikyou sostenía un paño húmedo en mi frente.

-¿Cómo te sientes?- pregunto con preocupación mi prima. Yo no pude responder me encontraba aturdida, mi cerebro se congeló por completo, aún que la escuchaba no comprendía del todo; luego un zumbido se apoderó de mis oídos... ya no escuchaba lo que Kikyou me decía, sólo cerré los ojos.

Volví a abrir mis cansados ojos, mi lengua estaba seca, mire a mi alrededor y pude ver como la puerta se abría y Kanna entraba por esta.

-Señorita por fin despertó.

-¿Qué pasó?- pregunté

-Bueno usted se puso mal y se desmayó. E..el médico vino a revisarla, la señorita Kikyou esta con él. - Ella siguio hablando, entonces algo en mi cabeza hizo click.
Los eventos antepasados se revobinaron en mi mente, como cuando retrocedes una película, hasta detenerla en el punto que se quiere y nuevamente le das play.

En mi cabeza pude revivir nuevamente aquello que me había llevado a hasta este punto

"¡Matrimonio! ¡Matrimonio! ¡Matrimonio!
¡Dos días! ¡Dos días!. (Risas)

Sacudi mi cabeza, mis manos temblaban. Mi corazón latia desbocado, me dolía...

-kagome...- el tono lastimero de Kikyou, me trajo de vuelta al presente. Ella me estrechó en sus brazo y yo no pude contener mis lágrimas.

- No entiendo. Él dijo que no se casaría, que me amaba, que confiara en él. ¿Así quiere que confíe? Se casará en dos día - mis lágrimas no paraban de rodar por mis mejillas.

Cuando estuve más tranquila salí de mi habitación. Al llegar al recibidor me encontré con Inuyasha y Kikyou, esta le reprochaba diciendo.

- ¡Tu hermano es un idiota Inuyasha! ¿Cómo se atreve hacerle esto a mi prima?

- Yo no se que tiene Sesshomaru en la cabeza, aún no comprendo como es que se va a casar con la hija de nuestro enemigo.

- Kagome esta destruida. Ella no se merece nada esto. - Inuyasha se percata de mi presencia.

- Kagome...- musita algo avergonzado, bajando la cabeza.

- No se preocupen, debí saber que algo así sucederia.

- ¡Es que yo no lo entiendo!- exclama molesto el Taisho.

- Ya somos dos- respondí.

-Tres- agregó Kikyou

- Mi hermano tiene que darnos una explicación - dijo antes de salir de la mansión Inuyasha.

Esa noche no pude casi dormir, en mi cabeza daba vuelta, todo lo que se había suscitado durante el día. Todo lo que había vivido con él. Sus palabras, sus caricias, todo me lo crei; y aún que no quería una parte de mi tenía la esperanza de que todo eso fuera una mentira, una horrible pesadilla de la cual pronto despertaria y con ese pensar me obligue a dormir.

 Sus palabras, sus caricias, todo me lo crei;  y aún que no quería una parte de mi tenía la esperanza de que todo eso fuera una mentira, una horrible pesadilla de la cual pronto despertaria y con ese pensar me obligue a dormir

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Nota.

♤♤¡Hola, Hola! ¡Feliz año 2021! Espero se encuentre bien aquí les dejo otro capítulo de Demonio de cristal, espero que lo disfruten♤♤

♤♤En este año les dejo lo mejor de todo corazón 😘😘♤♤

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