CAPÍTULO:II

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Unas horas después acompañaba a los señores Tanaka al templo, nunca había estado en uno, se respiraba tanta paz, era hemoso el lugar. Después de la ceremonia desido dar una vuelta y recorrer el lugar, me sentía relajada no queria irme de ahí, me sente en uno de los banquillos de bajo de un gran arbol y de pronto mis lagrimas rodaron por mis mejillas, a mi mente se vino la imagen de mi madre, sus palabras "kagome se fuerte" " Kagome hija te quiero" estas ultimas me las dijo antes de morir en aquél hospital, fue y sera el peor dia de mi vida... limpio mis lagrimas, por alguna razón de pronto tengo la sensación de que no estoy sola, que de algun lado me observa, miro a mi alrededor no distingo a nadie; tal vez es solo mi imaginación, me levanto y me encamino para encontrarme con los señores Tanakas.

Una semana después habia comenzado la Universidad, en la carrera de  administración. El complejo era inmenso. El día que comence me dirigi a la oficina del decano, toque la puerta.

- Adelante- dijo una voz femenina. Al entrar me recibe una hermosa mujer metida en una linda falda tubo roja que asentuaba su curbas y una camisa tejida balanca, cabello recogidos muy elegante.

- Tu debes de ser Kagome Higurashi, yo soy Kagura Hitari.- Yo me limite a asientir en forma afirmativa con la cabeza e hice una leve reverencia.

- Toma asiento- me indico. - Como sabras nuestra casa de estudios es una de las mejores del Japón, tu estas aqui por tu excelente calificación, en  el  examen de ingreso, me sorprendio mucho. Buen trabajo- dijo ella mirandome fijamente.

-Gracias señora- respondí apenada, no estoy acostumbrada a que me elogien aun  que me lo merezca. Me dio las indicaciones necesitarias para sacarle el mayor provecho a mi estadía por los próximos 4 años.


6 meses habían  pasado desde que había comenzado mis estudios, iba muy bien en ellos, me encantaba mi carrera. Me encontraba escuchando una clase,  cuando entra alguien al salon y le informa algo al profesor, este sin dudarlo me nombra.

-Higurashi, le solicitan en la oficina de la decano.- algo dudosa me levanto, recojo mis cosas y salgo del salon, con la mirada de todos sobre mi. "¿Que hice? "

Demonio de cristalWhere stories live. Discover now