Lovesick Boys © || Bakukami

| 14. ιт waѕ noт a ѕιn or ѕacrιlege |

❝Así que puse me dedo hacia arriba,
he terminado de ser tu esclavo,
mi generación ha tenido suficiente
y deberías tener miedo.❞

Bohnes | Middle Finger

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Antes de que pudiera agarrar el cigarro, Bakugō hizo a un lado su mano y alzó su brazo por encima de la cabeza.

Lo miré con curiosidad sin entender lo que intentaba a hacer, tampoco iba a saltar para conseguirlo, mi curiosidad era bastante alta más no la suficiente como para lanzarme de lleno a una evidente broma del mayor.

—Con una condición —Asentí incluso antes de escuchar el pedido —Solo vas a hacer esto conmigo o los idiotas —Me parece una solicitud bastante recatada y considerada para alguien que se droga, fuma y bebe alcohol cualquier día de la semana e incluso en horario de clases —Bien, ¿Alguna vez fumaste?

—No —Dije con honestidad y sonriendo con un poco de interés.

—Lo que tienes que entender primero es que... —Bakugō se acercó a mi rostro luego de dar una bocanada del cigarro y exhalar el humo en mi rostro, estuve cerca de fumadores desde mi infancia, el olor era molesto, pero lo que sea que él estaba fumando no era desagradable para mi nariz y eso provocó que mi curiosidad creciera de forma considerable —No debes tragar el humo.

—Entiendo —Eso creo, Bakugō por un momento se vio reticente a darme el cigarro y cuando cedió, él mismo posicionó el objeto entre mis labios, rozando de manera superficial mi boca.

—Inhala —Hice caso a sus palabras e inhalé un poco.

Admito que en el primer intento por poco me aparté de manera brusca porque cometí el error de tragar el humo por estar demasiado concentrado en los ojos de Bakugō y de la peor manera pude comprender el motivo por el cual me advirtió aquello al principio.

Pude ver que el rubio sonreía de forma burlona por mi error y mis mejillas se tornaron rojas por culpa de la vergüenza.

¡No es mi culpa! Es la primera vez que hago esto.

Ya en el segundo intento seguí cada uno de los pasos que Bakugō me señalaba prestando mucha atención a mis acciones. Desde el momento en que inhalé hasta que volví a exhalar y el humo rozara el rostro del chico de ojos rubí, quisiera haber prestado mayor atención a las clases de química y a las reuniones contra las drogas que realizaba de vez en cuando la academia, al menos de esa forma podría entender un poco lo que siente mi propio cuerpo.

Quizás Bakugō ya se lo esperaba, pero lo vi sacar otro cigarro de una cajetilla metálica donde no solo había hierbas sino algunos papeles que servían para crear lo que estaba fumando, pequeñas pastillas y una bolsita de polvo, fue entonces que me di cuenta de que realmente estaba fumando marihuana y él era una influencia mucho peor de lo que pensaba.