| ᴀᴜ ᴇsᴄᴏʟᴀʀᴇs | ʀᴏᴍᴀɴᴄᴇ ᴘsɪᴄᴏʟóɢɪᴄᴏ |
❝ La enfermedad del amor existe, consiste en intensos sentimientos y la necesidad de ser correspondido por esa otra persona. Llegando al punto donde el paciente pierde la noción de individualismo... si es que a...
A D V E R T E N C I A: El siguiente capítulo contiene escenas de índole sexual que pueden resultar incómodas de leer (no se trata de una violación), hago esta advertencia que puede ser considerada spoiler porque tal vez a algunos lectores no les guste del todo la clase de relación que tienen el Bakukamien este ámbito. Espero que disfruten de igual manera y cualquier comentario ofensivo será borrado, a menos que sean críticas productivas o quejas sin necesidad de faltar el respeto.
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❝Me atrapaste en un momento de rendición no hay nada que explicar, me tienes al borde de la indiscreción.❞
AllTimeLow | Drugs & Candy
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—Si todavía piensas que no te amo déjame decirte que puedes irte a la mierda, pero yo fui el primero en enamorarse, maldito príncipe.
Kaminari no tenía palabras para describir lo que sentía ante semejante confesión, Bakugō le estaba gritando en la cara que se había enamorado de él mucho antes de conocerse en el bosque clausurado.
Estaba tan acostumbrado a ser el único en decir que amaba tanto a otro que recibir por primera vez un “te amo” con la misma intensidad, sin titubeos y con tantos sentimientos en cada sílaba provocaron que sus piernas se volvieran gelatina.
Ignorando los alegres pensamientos del quinceañero, Bakugō suspiró fastidiado por revelar algo tan personal y que siquiera habló con sus amigos. Planeaba guardar para sí mismo los detalles de su enamoramiento porque no se sentía del todo cómodo expresando abiertamente frente al menor lo mucho que estaba interesado en él y que le deseaba hace más de un año. Lo sentía como darle las armas necesarias para acabar con él.
Decir en voz alta que desde el año anterior se fijó en aquel chico tan sobresaliente por diversos motivos, no muy positivos, le hacía sentir avergonzado, por primera vez en mucho tiempo. Pensaba que era extraño que una persona estuviera tan interesado por tantos meses y ahora que todo estaba dicho, no hay forma de que Kaminari diga que no lo escuchó incluso si promete fingir demencia para preservar un poco de su orgullo.
Que permaneciera callado solo le hacía sentir mucha más ansiedad.
Bakugō ya estaba más que cansado de discutir sobre el asunto de Uraraka y no iba a hablar de sus sentimientos, él no era esa clase de persona, no se sentía cómodo. Pueden llamarlo una acción inútil, pero estaba avergonzado por su extraña confesión y no es que planeara hacerlo de otra forma. Solo sentía pena y ya.
Fue entonces que sintió a Kaminari saltando sobre su espalda provocando que se desestabilizara un poco por el repentino ataque.
—¡Mierda, ten cuidado, idiota! —Escuchó un amortiguado sollozo contra su espalda y ante eso solo se dejó abrazar en completo silencio, no quería corresponder a la muestra de afecto, él era consciente de que el quinceañero realmente amaba a otra persona.
