Policial Love

15

Después de aquel día, Lilith sacó por completo de su vida a Eliza, la castaña no estaba de acuerdo obviamente pero lo entendió, jamás pensó que Lilith fuera a terminar con aquella relación de sexo-amigas luego de tantos años.

4 días después de aquello, Lilith y Zelda fueron invitadas por Sabrina al Baile de la escuela Baxter, pero ninguna sabía que la otra iría.

Zelda evitó ir a la ciudad esos días  estaba completamente deprimida por su nuevo fracaso, se había ilusionada sola y le dolía pensar que se encontraría con ambas mujeres en el centro de Greendale.

Aquella noche inesperada Zelda vestía un corto vestido pegado a su cuerpo color rojo, resaltando su cabello y labios de manera exquisita. La elegante mujer siempre había sido deseada por hombres y mujeres a lo largo de su vida, algo lo cual disfrutaba.

Lilith por su parte vistió un traje de chaqueta y pantalón negro, con una blusa blanca y corbata negra, su cabello liso, jamás fue muy femenina, solo en eventos muy esenciales y aquel día se veía tan bien en ese traje que hacía que las adolescentes de Baxter High se dieran vuelta a mirarla.
La morena llegó encontrándose con algunos ex compañeros de la su época allí,  conversando plenamente, cuando Sabrina la saludo.

-¡Lilith!- Saludo y la abrazó- ¿Cómo estás?

-bien... bien, gracias¿y tú?- Sonrió esperando una respuesta positiva.

-Oh ahí viene mi madre- Dijo viéndola entre la gente- Muy bien me voy, tengo que ir con mis amigos...

-Claro...- Le sonrió y luego buscó a la pelirroja  quien apareció entre la gente sonriente, aquello le paralizó el corazón.

La belleza que irradiaba era única, sus ojos resultaban sumamente deslumbrante bajo la tela roja de aquel vestido, sus verdes ojos hicieron contacto con los suyos, haciendo que la sonrisa de Zelda se borrará por completo,  pero aún así no detuvo su paso a la mesa donde estaba el ponche.

La pelirroja pasó a su lado sin hablarle, Lilith decidido seguirla inmediatamente hasta que llegaron a la mesa.

-Zelda...- Dijo mientras trataba de llamar su atención.

-¿hmmm?- Expresó sin mirarla y sirviendo ponche en un vaso.

- Te debo una disculpa...- Dijo mientras sonreía avergonzada- Se me olvido y yo...

- Oh- Expresó interrumpiendo y mirándola con una sonrisa Cinica- No deberías preocuparte, no quería arruinar los planes con tu... ¿Novia? De todos modos... Ni siquiera era una cita- La pelirroja pasó rápidamente empujándo su hombro al.pasar a su lado,  estaba a punto de llorar.

-¡Espera!...

La morena estuvo una hora buscando a la pelirroja y la encontró en una esquina de la pista,  cuando iba a ir en su encuentro una mujer le comenzó a hablar, haciendo que la perdiera complemente de vista y cuando volvió la mirada hacia donde están Zelda, ya no estaba. Se maldijo mientras salía del gimnasio.

-Eres una experta en cargarla, Lilith Wardwell- Se dijo a sí misma mientras veía a una Zelda furiosa entrar a la biblioteca de la escuela. Se dirigió rápidamente allí encontrando a Zelda en el sofá  frente a la chimenea.

-No quiero hablar contigo, Lilith,  agradecería que te fueras...

-Pero... Zelda, no fue mi intención...

-Vete, ni a tu novia respetas...-Dijo con rabia mientras observaba el fuego de la chimenea.

-¿Qué?- Dijo desconcertada recordando aquella mujer que le habló para preguntarle por el baño de la escuela- no estás equivocada, yo no tengo novia Zelda...

-No parecía cuando te beso- Ella se dio vuelta para mirarla- Deberías haberme dicho ese detalle antes de besarme aquel día.