CAPÍTULO 13

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Movía mi cabeza negando para alejar los pensamientos que mi amiga provocaba con sus preguntas, ya habían pasado 10min desde que Samanta me había mandado el último mensaje y eso era el tiempo límite de nosotras para responder. Me bombardea con muchos otro mensaje para que le respondiera

Antes de responderle me manda un mensaje diciendo que quiere hacer video-llamada, a mí no me gusta mucho la idea de que pueda ver mis expresiones cuando haga una pregunta que me altere, como la que tengo pendiente por responder, termine aceptando de todas formas (¿Quién me entiende?)

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‒ Bueno ahora sí, respóndeme ‒exige, me muestro indiferente (la actuación funciona por ahora)

‒ No tengo nada que decir ‒logro que mi vos sea relajada‒ solo he conocido a muchas personas y amistades nuevas ‒mi pequeño acto parece convencerla porque después de eso en toda la conversación no me volvió peguntar sobre amoríos.

Un rato después...

‒ Me tengo que ir ‒me anuncia somnolienta y bostezante‒ que gusto poder al fin hablar contigo ‒sigo notando la melancolía.

‒ Oye, no te preocupes prometo tratar de comunicarme más seguido ‒no logro más que una sonrisa forzada– la próxima vez, tenemos que planear para estar con Rose y hablar las tres ‒este último comentario si logro animarla.

‒ Eso me parece bien ‒agita la mano para despedirse‒ hasta luego.

‒ Claro, cuídate ‒cierro el programa, ahora intentaría dormir.

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Ya esta tarde y con todo el ajetreo de hoy ayudo a que me dormiría de inmediato.

*

Doy vueltas en la cama en la mañana, la luz me deslumbra ya era de día, tardo unos minutos en levantarme. Me doy una ducha y me preparo para el colegio, bajo las escaleras y veo mi desayuno ya servido después de comer voy a la cocina y me llevo unas cuantas galletas con chispas.

Esta vez el chofer no me puede llevar estaba buscando a mi tía al hospital, me alegra la idea de que ya la dieron de alta, subo al autobús y empieza a arrancar, por la ventana me distraigo viendo muchas cosas las cuales son las mismas de siempre, capta mi atención un auto familiar (no es posible)

Era el mismo auto que me había empapado de agua, lo reconocí de inmediato cuando vi la placa dorada, el autobús paso normal y yo no hice nada en ese momento decidí ignorarlo no vale la pena.

*

Llego a la academia, veo a Javier esperando en la puerta y no me adelanto al decir que me espera a mí.

‒ Hola ‒me visualiza mientras me acerco a el‒ gracias por lavarla ‒después de que lavaran su chaqueta se la mande a llevar, y hoy la tenía puesta.

‒ De nada ‒sin más nos encaminamos hacia nuestras respectivas clases.

No logro pensar en nada para hablar con él mientras llegamos, por suerte el rompe el silencio.

‒ Huele muy bien ‒él me sonríe, fijo mi mirada en él y le devuelvo el gesto‒ pensé que solo la habían lavado con jabón y agua, pero huele a suavisante ‒tengo que agradecer a la muchacha que la lavo.

El sol estaba brillar y para mi hasta ahora era así, nos cruzamos con Raquel digámoslo así es la superficial, egocéntrica, presumida, insinuadora, criticona, discriminadora e insufrible de la academia. Sin mencionar que no culpe con el nivel de un estudiante promedio; aunque claramente sus padres con beneficios no pueden permitir que su hija se vea perjudicada por eso y pagan para que quede entre los mejores 50, en fin la peor y para remate le caigo mal.

La Respuesta De La Venganza (Editando)Where stories live. Discover now