Capitulo 11

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Esas palabras parecían colgar sobre el grupo como una nube siniestra. Eso era cierto. Como vestía la ropa de Marvis, la había cubierto bastante bien y nadie podía decirlo previamente. Ahora, con la barriga al descubierto, tenía un bulto evidente. No habría sido tan impactante, excepto por el hecho de que cuando la había lavado solo diez días antes, no tenía ningún bulto. Si estaba creciendo a esa velocidad, solo significaba una cosa.

"Los duendes la dejaron embarazada". Darius frunció el ceño.

"¡No!" Shay soltó un grito.

Damus asintió. "¿Qué vamos a hacer?"

Darius se encogió de hombros. "¿Qué podemos hacer? Por su tamaño, diría que le queda otra semana. La entregamos, dejamos que sea el problema de otra persona ".

"¿Crees que estarán felices si llevamos a casa un litro de duendes a la puerta de su casa?"

“Está bien, está bien… podríamos esperar aquí. Déjala parir. Mata a los pequeños bastardos cuando salgan, y luego podemos enviarle la factura ".

"¡No! ¡No lastimes a mis bebés! " Ella apretó su estómago.

No iba a comenzar una discusión pro-vida aquí mismo. Parecía querer proteger a los niños, aunque era casi seguro que eran duendes. Sin embargo, me acerqué a ella de todos modos, agarrándola de la mano como apoyo. Cuando pensó que estaba siendo abusada, trató de apoyarme, lo menos que puedo hacer es intentar apoyarla.

"¿Puede una mujer sobrevivir teniendo un hijo duende?" Yo pregunté.

Darius me miró. “Si tiene un nivel lo suficientemente alto, tal vez con algo de resistencia al daño, seguro. Sin embargo, ¿un aldeano de bajo nivel como Shay? Esos bebés se la comerán viva por dentro. Incluso si pudiera sobrevivir, el costo médico sería extraordinario ".

"¿Qué tal un aborto?"

"¿Qué diablos es un aborto?" Darius frunce el ceño.

Antes de que pudiera explicarme, una persona más entró en el pequeño claro. Era Ricardo, y en el segundo en que entró, de repente tuve una sensación de hundimiento en el estómago. No le hizo nada a Marvis, ¿verdad?

"Regresé aquí para encontrar al mudo solo, y ahora los veo a todos aquí". Sus ojos se volvieron hacia el desnudo Shay. "Spotting para divertirnos un poco, ¿verdad?"

"Está embarazada", respondió Darius con desdén.

Los ojos de Ricardo brillaron y se entrecerraron en el vientre protuberante. Se acercó a la niña, de pie junto a ella. Sus ojos lucían como si tuvieran arrepentimiento. Quizás Ricardo era un ser humano comprensivo después de todo.

"Es una vergüenza." Él suspiró.

Un momento después, se quitó el hacha y la levantó. Antes de que alguien pudiera reaccionar, lo derribó. Shay apenas dejó escapar un sonido cuando su cabeza se apartó. La sangre se disparó por todos lados, un montón salpicando mi camisa. Estaba paralizado, incapaz de hacer un movimiento.

"¡Qué diablos, Ricardo, lo estábamos discutiendo!" Darius solo parecía un poco molesto.

Para mí, la visión del cuerpo decapitado frente a mí fue demasiado para soportar. ¡Su mano sin vida seguía agarrando la mía! Golpeé a Darius con Seducción de nuevo. La ira brotaba de mí y quería desahogarme. Darius me miró, con una pizca de lujuria en sus ojos que parecía completamente fuera de lugar en la atmósfera actual.

Cuentos de una seductora[Libro 1] Y Cuentos De Una Hechicera[Libro 2]Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt