sumidos por el placer

capítulo 57

A la mañana siguiente mientras terminaba de recoger mis cosas del escritorio mi teléfono empezó a sonar, era Cristiana, choqué mi mano contra mi frente, había olvidado por completo que ella iba a buscar sus cosas a casa de mamá.

—¿Si?

—Faith, mamá no está —me informó ella completamente furiosa.

—¿Cómo así que no está? ¿De qué hablas?

—Así como lo oyes, estamos frente a la casa y la sala está desocupada, la casa al parecer está vacia.

Solté un suspiro y arrojé mis hombros hacia abajo.

—¿Y dónde podría estar? ¿Con el abuelo?

—No, ya llegamos a su casa y no está por ahí, me estoy empezando a preocupar por mis cosas.

—¿Y los vecinos que te dijeron?

—Cuando yo llegué el señor Felipe me dijo que ella había desocupado la casa hace una semana asi que... ¿Ahora qué?

—Bueno, tocará conseguirte nuevas cosas mientras la encontramos y averiguamos que pasa.

—Terry y yo tenemos la teoría de que vendió todo y se fue a quien sabe donde a iniciar una nueva vida.

—No, yo siento que esta cerca, bueno Cristo entonces haz una lista de lo que necesitas, cuando me mudé de Gudrow vendí todo, el dinero está en una cuenta de ahorros, tendremos que usarlo.

—Bien entonces transfiéreselo a Terry y nos pondremos en esa labor.

—Si, está bien, yo me encargaré de buscar a mamá.

Colgué el teléfono y terminé de empacarlo todo ¿Por qué esa mujer tenía que complicarlo todo de esa manera? Volví a casa con ánimo, el fin de semana me reuniría con Lilyth para empezar a planear mi boda, de solo pensarlo mi cuerpo se estremecía y una sonrisa tonta se me pintaba en el rostro, mi boda, mi propia boda, la primera boda a la que habia asistido en mi vida fue la de Lilyth, y ahora está divorciada.

La cosa era que iba a ser un evento muy importante y yo sería la protagonista, solté un suspiro y me mordí el labio antes de observar fijamente mi anillo, Faith Taylor McGregor, sonaba tan extraño pero tan poderoso al mismo tiempo.

Cuando llegué a casa mi bebé me recibió con una sonrisa y yo le brindé un sonoro beso en su mejilla, definitivamente me estaba mal acostumbrando a tenerlo cerca.

—¿Se portó bien hoy? —le pregunté a Silvia.

—Mejor que ayer —bromeó la chica mientras recogia sus cosas—. Por cierto Faith, quería pedirte disculpas por lo de ayer con Dan.

—No te preocupes, soy bastante consiente de que Dan es un tonto.

—Yo... yo pensé que había madurado un poco, pero al parecer aún sigue creyendo que el mundo gira en torno a él y que todos lo quieren, es un chico agradable pero...

—Pero es un idiota —completé yo acompañándola a la salida.

—Si, es un idiota, como sea, nos vemos mañana.

—Adiós Silvia, nos vemos.

Fui con Archer a su habitación para jugar un rato con él, era lo que más extrañaba de pasar tiempo con mi bebé, ver todas sus expresiones y la curiosidad con la que miraba todo me resultaba divertido y entretenido, mientras jugábamos con una pelota su padre decidió llamar.

—Justo a tiempo mi amor —le dije a Chris antes de acomodarme al lado de Archer.

—¿Qué están haciendo ustedes dos? —preguntó él asomando su cabeza en la pantalla.