Capítulo 34

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Toni tenía razón, el baile no era difícil, salvo la parte donde quedaría en ropa interior frente a todo mundo, pero no es algo que no pudiera hacer, y la idea resultaba bastante emocionante.

-Lo sabes completo.- Aplaudió Toni con una sonrisa. Fangs asintió de la misma forma.

El baile era realmente sencillo, no incluía acrobacias o algún tipo de movimiento de gimnasia el cual pudiera asustar a Betty.

-Yo recomendaría que usaras algo negro ese día.- Dijo el moreno acercándose a ella. -Quedaría increíble con tu tono de piel.

-Intenta que tenga encaje, a Jughead le encantará aun más.

¿Cómo sabía eso?

Betty se sonrojó.

-Gracias por los consejos.- Dijo bajando del pequeño escenario. Miró la hora en su teléfono, no faltaba mucho para que dieran las dos de la tarde. Debía ir a casa. -¿Creen que Jughead tarde?

-¿Me extrañabas?- Dijo el pelinegro entrando.

Betty lo miró con una sonrisa, el se veía un poco sonrojado, y aunque llevara el gorro sobre aquel sedoso cabello, se notaba un tanto revuelto.

-Demasiado.- Respondió la rubia.

-¿Qué hacían?

-Fangs intentaba enseñarme como dar vueltas sobre esto.- Dijo Toni palmeando el tubo a su lado. -No funcionó.

-Eres demasiado novata.- Dijo Fangs encogiéndose de hombros.

Jughead abrazó a Betty por la espalda, recargó su cabeza sobre el hombro de la chica, llevó su nariz hasta el hueco entre su cuello y aspiró. Amaba su aroma. Betty cerró los ojos al sentir la respiración del chico sobre su cuello. Tal vez podía quedarse un rato más con el.

-Debo llevarte a casa ¿Cierto?

-Aún es temprano.- Murmuró Betty. Jughead rió ligeramente.

-No quiero que tengas problemas con tus padres.- Se separó, colocó las manos sobre la cadera de la rubia haciéndola girar hasta quedar frente a el. -¿Sabías que adoro tus ojos?

El aliento de Jughead impactó contra el rostro de la chica, olía ligeramente a algún tipo de alcohol.

-¿Bebiste?

El rostro del pelinegro se compacto. Los nervios acababan de apoderarse de el.

-Sólo fue una copa.- Intentó lucir tranquilo. -No es nada.

Betty lo miró con los ojos entrecerrados, como si intentara detectar alguna mentira.

-De acuerdo.- Se acercó más quedando a milímetros de el. -¿Me llevas por favor?

Jughead depositó un beso sobre la nariz de su novia, sonrió y se giró hacia sus amigos. Ninguno parecía feliz.

-Vuelvo en un rato.

-Cuidado.- Dijeron en tono amenazante.- Jughead sacó las llaves de su chaqueta, pasó el brazo sobre los hombros de la rubia y juntos salieron del bar.

(...)

La cita de Veronica estaba cerca de empezar, habían acordado ir a almorzar a Pop's después del colegio por lo que la morena estaba más que ansiosa porque el dichoso timbre sonara.

Miró el reloj, las manecillas se movían demasiado lento para su gusto. Cerró los ojos y deseo con todas sus fuerzas que el tiempo pasara más rápido.

El timbre sonó.

Guardó todas sus pertenencias y con su característica elegancia salió del aula. Miró a ambos lados evitando impactar con algún troglodita de futbol. Tomó una gran bocanada y comenzó su camino hacia la taquilla.

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