Capitulo 3

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El azul y oro era el periódico escolar de Riverdale High, en él se redactaban todos los acontecimientos del instituto y algunas veces, lo que pasaba fuera de él, Betty, nuestra perfecta rubia, era la editora en jefe, se encargaba de revisar, corregir y algunas veces sugerir lo que su único compañero debía escribir, lo último casi nunca ocurría, pues Jughead era el escritor estrella de todo Riverdale High.

-Así que... ¿Archie y tu van a casarse?

- ¿Qué? No, no lo sé. - Betty sacudió la cabeza.

-Creo que no es la pregunta correcta. - Se acercó al escritorio de la rubia recargando sus brazos en este. - ¿Tú te quieres casar con el? - Levantó una ceja.

-Sí. - Afirmo. -Supongo.

-Entonces no estás segura.

-No es eso, es sólo que no puedo verme con alguien más.

-Eres tan romántica. - Sonrió burlón caminando a su escritorio

-Hablo de que, nunca he estado con alguien más ¿sabes? Archie es el único al que he querido.

- ¿Y ese es un problema?

-No, supongo que no.

- ¿Entonces...

- ¿Por qué tantas preguntas de repente? ¿Problemas del corazón Jughead? - Cuestionó poniéndose de pie.

Jughead rio.

-Sueñas Cooper. - Suspiró. -Es sólo que tal vez escuché por ahí que está buscando un anillo de compromiso. - Se encogió de hombros.

Sin embargo, su rostro pasó de ser una sonrisa a una gran confusión al ver la cara de Betty, pues ella lejos de mostrar emoción parecía estar realmente asustada.

- ¿Hablas en serio?

-No lo amas.

- ¡Claro que sí! ¿Por qué sigues preguntando eso?

-No lo pregunté. - Rio. -No lo amas, tal vez lo hiciste, pero ya no lo amas. ¿Qué pasa Cooper? ¿Por qué se terminó el amor? - Se cruzó de brazos.

-Sí lo amo, deja de dudar eso. - Se abrazó a sí misma. -Pero, tenemos 17 Jug, somos muy jóvenes.

-Creí que la edad no importaba si el amor estaba presente.

Betty sonrió ligeramente.

-Me enamoré de Archie a los 7 años, supongo que poco tiempo después el igual se enamoró de mí. - Soltó una risa realmente ligera. -Pero hasta los 12 comenzamos una relación. Desde entonces todo siempre ha sido...

-Perfecto. - Jughead asintió compresivo. - ¿Por qué ya no lo es?

-Creo que queremos cosas diferentes, él quiere quedarse en Riverdale, yo quiero irme, escapar de aquí. - Suspiró. -No quiero la vida de mis padres, no quiero premios por ser perfecta, no quiero...- Nuevamente fue interrumpida por el chico del gorro.

-No quieres la vida que quiere Archie. - Concluyó.

Para este punto Betty tenía los ojos llenos de lágrimas sin embargo no dejaba caer alguna, demostrar sus emociones no era precisamente bueno para la reputación de su familia, ninguno quería que los rumores de que algo no andaba bien en casa corrieran por ver a la más pequeña de los Cooper llorando.

Jughead caminó hacia la puerta y la cerró, hizo lo mismo con las cortinas y persianas que rodeaban el azul y oro, una vez que terminó camino firmemente hacía ella y la abrazó. Betty comenzó a llorar.

-No quiero separarme de él.

-Entonces no lo hagas, Betts, Archie es un buen chico, explícale como te sientes, seguramente lo va a entender. - Betty asintió. Después de unos minutos se separaron. - ¿Te sientes mejor? ¿Más tranquila?

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