La luz verde deslumbró su mirada, indicando que continuara con su camino, exhaló con fuerza, pisó el acelerador repasando mentalmente lo estúpidos que eran los Ghoulies como para atacar el bar. Miró a su alrededor dándose cuenta de lo cerca que se encontraba del Wyrm, a lo lejos pudo ver a sus dos mejores amigos cargando el cuerpo de la pelirrosa que adoraba, aceleró aún más haciendo que el polvo a su alrededor se levantara, y captando de la misma forma la atención de las serpientes a su alrededor, vaya que el rey sabía hacer una entrada.
Frenó con fuerza cuando estuvo frente al trío de chicos, quienes no dudaron en acercarse en cuanto el ojiverde detuvo el coche.
-¿Qué pasó?- Preguntó mirando a Toni desde la ventana quien seguía inconsciente.
-La hirieron, fue después de que ayudara a todos a salir del bar.- dijo Fangs abriendo su puerta y subiendo para que Sweet pudiera colocar a la chica sobre él. -No te preocupes, acabamos con quien lo hizo.
-¿Está viva?- Preguntó Jughead con temor y sin dejar de mirarla. Sweet asintió.
-Pero debemos llevarla al hospital.- Subió al auto en el lado del copiloto.
-Fangs.- Dijo mirándolo. -Conduce tu.- Bajo el auto y entro al asiento de atrás, Jughead tomó en brazos a su amiga el impacto de bala había sido ligeramente arriba de la cadera, los tres rezaban deseando que no hubiera un organo importante ahí, el pelinegro apretba con fuerza la camisa sobre la herida intentando retener la sangre. Miro a su mejor amiga, su cuerpo y manos temblaban, la palidez en el rostro de la chica lo hacía sentir tanto miedo que quería llorar.
Se estaba quebrando.
-Tranquila.- Murmuró más para él que para ella cuando se dio cuenta que intentaba hablar.
-Jug...- Dijo con esfuerzo. -Yo no... Be...
-Shhhh, guarda tus fuerzas, todo estará bien.
-Tengo frío.- Contestó la morena. Jughead colocó su chaqueta sobre ella.
-¿Mejor?- Toni asintió.
¿Cómo había sido tan estúpido como para no notar que iban a hacerles daño?
El regaño mental ocupaba gran parte de su mente mientras Fangs conducía al lado bueno de las vías del tren, se sentía la persona más idiota del mundo, había estado tan enfocado en su relación que olvidó por completo los problemas que existían en el lado sur.
Se olvido de sus obligaciones como rey.
-Más rápido- Exclamó, acarició el rostro de su amiga cubriéndolo mientras la luz roja iluminaba el capó del vehículo.
Las lágrimas comenzaron a bajar, lo había arruinado todo.
(...)
Los ojos de Archie se abrieron tanto que Betty pensó que se saldrían de sus cuencas.
La mano libre del chico sujetó la navaja de su pantalón y comenzó a hacer cortes sobre las piernas de la menor de los Cooper, los gritos de Betty inundaban la casa, la sangre comenzaba a correr por sus piernas, mientras las lagrimas aún se derramaban sobre sus mejillas.
Archie dio un paso.
- Oh no.- Dijo burlón. -Yo no haría eso si fuera tú. - Arrastro la navaja desde el muslo de la chica hasta su clavícula.
-Verás pelirrojo, si tu te acercas.- Colocó la navaja sobre el cuello de la rubia. -Ella muere ¿Entiendes?
Las lagrimas de Betty no dejaban de rodar mejillas abajo.
-Tranquila Betts.- Dijo Archie mirándola. -Llame a Kevin antes de venir, todo estará bien.
Un atisbo de tranquilidad cruzó el cuerpo de la chica. Todo estaría bien muy pronto.
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Our Perfect Story
Teen FictionBetty Cooper es la chica perfecta, tiene la familia perfecta y el novio perfecto. Su vida parece ser color de rosa, pero lo perfecto es aburrido y ella merece un poco de la diversión Jones. ¿Qué le pasará a la pareja perfecta?
