Profesora: Escojan una pareja, haremos un ejercicio de conversación... ¿Chiara?
Chiara: Karol.
Karol: ¿Yo qué?
Profesora: Karol, siéntate frente a Chiara.
Karol ¿Es en serio?
Profesora: Nunca bromeo.
Karol: Como sea.
Me senté frente a Chiara, ella me miraba con envidia.
Profesora: Ahora, van a elegir un tema y hablar sobre él, mantendrán una conversación de dos minutos.
Chiara: ¿Cualquier tema?
Profesora: No puede ser de sexo, política ni religión.
Chiara: ¿Puede ser de una persona?
Profesora: Si, Chiara. Puede ser de una persona.
Karol: Si dices Ruggero serás patética.
Chiara: ¿Por qué? ¿Te da miedo lo que pueda decir?
Karol: Maestra, necesitamos un pañuelo para Chiara, ya está comenzando a babearse.
Profesora: ¿Por qué?
Chiara: No es cierto, profesora.
Profesora: Bueno, Karol, Chiara... Son las primeras. Pasen al frente y comiencen su diálogo.
Karol: No se me vayan a caer del asiento, niñas y si ven baba cayendo de la boca de Chiara cubran sus caras.
Todas rieron, incluso la profesora. Esto iba a estar muy bueno. Chiara no me conocía, ella pensaba que iba a poder defenderse por haber sido la novia de Ruggero. Tenía un plan, no iba a hablar de Ruggero, quería que ella se mirara desesperada, así que mientras ella trataba de acabarme hablando de Ruggero yo le daría a su cochino ego, así ella se mirara la ardida mientras que a mí sólo me resbalaría todo.
Chiara: Ruggero fue mi novio.
Karol: ¿Eso te repites al espejo cada mañana? —todas rieron.
Chiara: Lo he besado muchas veces.
Karol: No deberías babear, por ahí se te puede salir alguna gota de la de él —parecía comedia, todas reían cada vez que yo decía algo.
Chiara: Volverá conmigo cuando salga de aquí.
Karol: Ahhh, mientras les das usos inadecuados a las verduras —si, más risas.
Chiara: ¡Profesora! Dijo que nada de sexo.
Karol: Chiara, pero que mente tienes, que va de verduras a sexo... Ella fue la que acaba de decir la palabra.
Profesora: En eso tiene razón, Chiara. Tú fuiste la que desvíaste la conversación.
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Niña Mal
FanfictionLas fiestas, la ropa, los chicos, la fama, el dinero, la posición social y todos los demás placeres de los que puedo gozar. A mis cortos 16 años he vivido muchas cosas, nada malas por suerte. Padres millonarios y viviendo la vida que me merezco. Me...