Karol: Así es como reaccionaré —di la vuelta y me puse un abrigo.
Ruggero: Karol. ¿Qué haces?
Karol: Me largo de aquí —me dirigí hacia la puerta.
Ruggero: No te vayas, déjame explicarte —fue atrás de mí.
Karol: ¿Qué me vas a explicar? ¿Que me mentiste?
Ruggero: Yo no te he mentido.
Karol: Me ocultaste lo de Eunice y aún así no me importó, me obligas a que cambie cuando tú no lo has hecho —salí por la puerta, Ruggero me siguió.
Ruggero: ¡¡A dónde vas!! ¡Son las cuatro de la mañana!
Karol: Lejos de ti. Ay, si, que niña mal, eres una malvada, perversa, juega sentimientos, pero yo soy una mentirosa. ¿Eso si no?
Ruggero: ¡Detente y déjame explicarte!
Karol: ¡¡No me expliques nada!! No me vuelvas a buscar, tu padre tenía razón; buscas niñas malas que te entretengan y cuando ya se portan bien te buscas una más mala.
Ruggero: Eso no es cierto, déjame explicarte.
Karol: ¡Déjame en paz!
Ruggero: Por favor escúchame, si después de escucharme quieres irte lo aceptaré.
Karol: ¡¡No quiero escucharte!! Escuché suficiente —detuve un taxi.
Ruggero: No hagas esto —me subí al taxi—. Prometimos juntos ante todo y todos.
Karol: Ya veo porque lo prometiste... —arrancó el taxi—. Al aeropuerto, por favor.
Llegué al aeropuerto y tomé el primer vuelo a Las Vegas, sentí el vuelo más eterno de mi vida, tomé otro taxi para llegar a casa, cuando entré Denise me recibió.
Denise: ¿Que hace aquí?
Karol: ¡Es mi casa, ignorante!
Denise: ¿No estaba en el internado con el joven Ruggero?
Karol: ¡Qué te importa, empleaducha!
Denise: ¿Sus padres saben que regresó? ¿O es que se escapó?
Karol: ¡Pero qué criada más metiche! ¡Ve a limpiar cualquier cosa, déjame sola! —subí las escaleras y llamé a Caro.
Caro: ¿Hola?
Karol: Caro, regresé a Las Vegas.
Caro: ¿Qué pasó? ¿Por qué regresaste?
Karol: Hablamos de eso en otro momento, nos vemos esta noche en el “Paradise Club”.
Caro: Pero...no entiendo nada.
Karol: ¡Sólo haz lo que te digo! —colgué. Mi puerta sonó—. ¡Lárgate, Denise!
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Niña Mal
FanfictionLas fiestas, la ropa, los chicos, la fama, el dinero, la posición social y todos los demás placeres de los que puedo gozar. A mis cortos 16 años he vivido muchas cosas, nada malas por suerte. Padres millonarios y viviendo la vida que me merezco. Me...