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XX: Una Fiesta Llena De Reencuentros.

- ¡¡Fiesta!! - gritaba Cream entusiasmada entrando a la casa sosteniendo su celular en alto y meciendolo hasta llegar a ellas.

- ¿Fiesta? - preguntó Blaze esta vez mientras que Amy aún seguía perdida tocando sus labios de aquí a allá, el beso con Sonic aún la tenía emocionada, más sin embargo había algo de miedo en su interior.

- Si, Rouge me envió la invitación por mensaje, es para todos nosotros, dijo que "alguien importante" estaría ahí.

- ¿Importante? - preguntó saliendo de su mente.

- Si, dice que "es una sorpresa", los chicos de Dan también estarán ahí. - finalizó con un temple neutro, su rostro quería sonreir por qué vería a Sonic, más también tembló un poco al recordar a Shadow.

- ¿Crees que sea algún plan de Shadow? - cuestionó Mighty con preocupación.

- Quizá...

- Y si lo es, lo enfrentaremos todos juntos. - musitó Knuckles. - creo que ya eh estado bastante tiempo al margen, si el imbécil quiere algo contigo tendrá que pasar sobre mi primero.- aclaró señalandose como si fuera un super héroe.

- Hay que ir, demuestra que no le temes, y si es necesario lo confrontaremos.

Añadió Blaze con su puño en alto, Amy se sintió motivada, entonces decidió.

- Cream, dile a Rouge que ahí estaremos.

...

- Valla, este es un sitio lindo. - susurró Sally llegando al hotel, los chicos la llevaron hasta su "hogar" y le encargaron una habitación, luego de eso le informarian del plan.

- Habrá una fiesta esta noche.

- ¿Ésta noche?, eso es velocidad. - susurró, puesto que nada más llevaban un día en la ciudad, pero tenía lógica, si se iba a encontrar con Sonic, al menos deseaba que fuera en un momento planeado y lejos de improvisaciones.

- Será en casa de una amiga, tiene un buen lugar y es grande, estarás bien camuflajeada, prepararemos el escenario perfecto. - susurró Shadow sobre su hombro mientras ella sonreía. - pero no reveles quien eres, no a los demás.

Ella inclinó su cabeza, miró a Scourge quien tampoco parecía entender, pero luego todo se aclaró.

- Podemos sacar provecho de eso, obtener lo que quiero a cambio de tu silencio. - “¿y qué pasa conmigo?" cuestionó. - luego de eso podrás hacer lo que quieras, revelaremos su crimen frente a todo el mundo y después... Jajaja, estará tras las rejas del reino Acorn.

...

- ¿Una... Fiesta?

- Es lo que dice aquí, es una invitación de la chica del otro día.

- ¿Rouge y su amiga... Mayra?

- María. - respondió Sonic con una sonrisa.

- ¿Pero, por qué nos invitaría a ambos? - cuestionó Tails con sus gafas puestas. - esto... Esto huele muy mal, Sonic.

- Si, lo sé. - respondió él re-leyendo el mensaje. “Hola Azul, esta noche habrá una fiesta en mi casa, te mando la ubicación, obviamente debes estar ahí, junto con tu amigo de colas, nos vemos a las 8 en punto, no llegues tarde. - Rouge."

- ¿Crees que sea algún truco de Shadow? - cuestionó Tails rápidamente.

- No, a Shadow no le agradaría tenerme cerca en un mismo lugar, iremos a ver que traman, además...

Puede que ella esté ahí.

...

La noche estaba cayendo, todos estaban listos, los invitados poco a poco iban entrando, había un grupo de amigos con un escorpión naranja el cual solo miraba al resto, del otro lado estaba un erizo albino el cual devolvía la mirada discriminativa, Amy notó todo eso al entrar, María fue quien les abrió la puerta, mirandoles de arriba a abajo, claro que sabía que Amy era diseñadora, pero no sabía cuánto estilo podía tener ella fuera del trabajo.

- ¿Qué tal? - cuestionó Rouge al verlas llegar, caminó hasta todos y los abrazó uno a uno hasta detenerse en Knuckles, a quien miró de forma cómplice, para luego apartarlo del resto y llevarlo a solas a su habitación.

- Valla, y decía que estaría contigo toda la noche - murmuró Mighty mientras rascaba su frente.

- Bueno... Al menos él se divertirá. - devolvió Blaze el comentario cruzando sus brazos por detrás de su cabeza.

- Vallamos a recorrer el lugar, disfrutemos, al fin y al cabo a eso venimos. - añadió Cream con voz entusiasta, entonces comenzaron a adentrarse.

El lugar se veía oscuro, Amy divisó a lo lejos una de las camionetas negras llegar, no esperaba ver algo agradable, pero eso... Eso realmente le partió el corazón.

El azabache había llegado a lado de Scourge, pero no esperaba ver a otra chica tomada de su mano derecha, como ambos solían pasear.

Ya no le importaba, lo odiaba, pero... Entonces, ¿Por qué comenzó a llorar?

Vio al trío llegar hasta ella, con cautela se secó las lágrimas y puso su figura lo más erguida posible, aunque aún se veía insignificante, ella era hermosa, tenía unas piernas altas y un cuello largo y delgado, su piel de tono bronceado brillaba más en el bello conjunto negro que llevaba, sus tacones eran algo bajos, más podía apostar que la revazaba por más de una cabeza de altura. Quería retroceder, pero si algo había aprendido en estos días era que escapar nunca solucionaba nada, lo iba a enfrentar, no dejaría que la hiciera menos, no en ese lugar, no en su ciudad.

- Rose.

- Hola Amy. - saludaron ambos.

- Scourge. - respondió ella decidiendo deliberadamente hacer a un lado al primer chico.

- Valla, ésta es la famosa Amy Rose. - habló la acompañante, sus enormes ojos azules la miraban de arriba a abajo como juzgando todo de ella.

- ¿Famosa? - cuestionó con una voz baja y, sin querer, volteó a ver a Shadow con sus ojos entre cerrados.

- Pues claro, ¿qué no eres una de las más famosas diseñadoras del lugar? - preguntó con tono suave, Amy entonces se sonrojó. - Sally, mucho gusto. - le dijo con una bella sonrisa algo que la hizo retroceder, su temple tan grande, su figura perfecta, su voz fuerte, ¿estaba viendo bien?, ¿ella... Acababa de ser amable?.

- Un placer. - respondió con dudas mientras le devolvía la sonrisa, solo que la suya era un tanto nerviosa.

Quizá no lo sabían, pero ese primer encuentro sería significativo.

- Te ves bien, Rose. - interrumpió Scourge mientras se unía a la plática.

- Si, el rojo siempre fue tu color. - respondió Shadow ahora acercándose al grupo, los tres parecían intimidarla, pero ella no se daría por vencida, lo había prometido, si se dejaba vencer no sólo perdería ella, todos sus amigos también, la habían apoyado bastante, así que como agradecimiento a ellos, ganaría esa batalla sola.

La plática se interrumpió, ella se había perdido en sus pensamientos que ni siquiera tuvo oportunidad de observar lo que se aproximaba, una avalancha había comenzado, ¿quién saldría vivo?, no lo sabía.

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