Aprender...1/2

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Eda acaba de llegar de casa de estar con Serkan, desde que habían empezado a salir solo se habían quedado en su casa una vez para desayunar y otra para cenar y ver la estrella que le regaló.

Llevan ya tres meses saliendo y Eda siente que quiere pasar a otra fase de la relación, pero Serkan no la apremia. Él parece estar cómodo y no necesitar mas y en cambio ella siente que cuando Serkan la besa podría deshacerse. 

Él no ha pasado de meterle la mano por debajo de la camiseta para poder acariciarle la espalda y ha notado que cuando lleva los hombros descubiertos él se los besa y los acaricia a la mínima, pero no ha pasado de ahí.

No sabe si es que Serkan la quiere pero no es su tipo, si no se atreve a ir a mas porque es muy pronto para él o si es que simplemente no le excita lo suficiente.

Se va a la cama con ese sentimiento de pesar aunque ella siente que Serkan la quiere.

Serkan llega a casa, se prepara un whisky y se va a la terraza a mirar el cielo que tanto le tranquiliza, solo son unos grados de diferencia en el mapa del cielo. Lo sabe, no le gusta que cambien las cosas, pero el cielo que es su referente le dice que todo cambia, que puede estar todo en su sitio solo que puede moverse, sin dejar de ser el cielo, sin dejar de estar ahí.

Eda se aburre con él, sus citas cada vez son mas cortas, no la trae a casa con lo que le gusta tenerla ahí, pero el día que le regaló la estrella estuvo apunto de hacerle el amor en el sofá, sus ganas eran tantas que tuvo que levantarse y alejarse de ella.

Pero Eda no ha hecho ni un solo movimiento para acercarse a él de esa manera, los besos que a él le encienden parece que a ella le asustan por lo que se refrena.

No han hablado del tema, entiende que para ella, que es mucho mas joven, los ritmos a lo mejor son diferentes. Eda ha tenido solo una relación larga antes, con Cenk, según le dijo estuvo con él casi dos años.  Y para él la última relación seria fue con Selin, pero fue una relación de amistad, por eso ella, cuando quiso ir a mas y él le dijo que no, ella le dejó. Nunca la quiso, nunca sintió por ella nada mas que el cariño de la amistad cercana, nada más. 

Nunca esperó encontrar de un día para otro su felicidad, Eda le llena de todas las formas posibles, ella es su presente y su futuro y él lo tiene clarísimo. 

Mira la copa, ni la ha probado, entra en casa con la certidumbre de que Eda es la definitiva. De que Eda es la que le complementa y de que ella es tan joven que se lo tiene que tomar con calma, pues quiere ser también el definitivo.

Eda sale de su casa, bajo las escaleras le espera Serkan, tan impresionante como siempre, con su traje de tres piezas, apoyado en el coche con las piernas estiradas y cruzadas en sus tobillos.

Ella se recuesta contra él y le besa en la boca, lo que parece que va a ser un beso de buenos días se va convirtiendo en un ataque a su boca que hace que Serkan se incorpore y separe el cuerpo de Eda de su zona sur. 

Ejjjjjjem- carraspea Serkan- Buenos días mi hada.

Eda sonríe- Buenos días Serkan Bolat.

Serkan sabe que hoy va a ser un día muy largo, como todos los que pasa con ella a su lado. 

Eda sonríe mientras se sienta en el coche, Serkan le tiene miedo pero la desea, sólo tiene que ser lo suficientemente valiente para hacer que él se olvide de pensar y solo sienta.

¿Porque sonríes?- le pregunta Serkan con una media sonrisa.

Te quiero. Hoy no te lo he dicho aun. - le dice sin quitar la vista del camino.

Serkan le quita el pelo de la cara con un dedo y mirando también el camino le dice- nuestros sentimientos son mutuos.

Llegan a la oficina, a media mañana, Eda y Melo están en el archivo hablando apoyadas en la mesa.

Lo que proponéis...Where stories live. Discover now