Nos hiciste esperar mucho tiempo...

Capítulo 3

Mike me guía hacia una mesa que no se aleja mucho del centro de la cafetería. En ella se encuentran tres personas sentadas mirando en nuestra dirección, un chico y dos chicas nos miran, una de ellas con una resplandeciente mientras que la otra tiene una un tanto forzada, el chico simplemente me sonríe de forma tímida. Me siento al lado de una chica con gafas, he de admitir que lo he hecho por la cámara que colgaba en su cuello.

-Hola, soy Jessica Stanley, -La de la sonrisa forzada me extiende la mano -

-Karina -sin querer ser grosera le extiendo la mano y la estrecho devuelta-

-Yo soy Eric -él chico asiatico me sonríe amistosamente-

-Karina, un gusto -él por suerte no me cogió de la mano como su amigo...-

Sin esperar mucho me giro a la chica con esa cámara tan buena que colgaba de su cuello.

-Hola, ya me habrás oído pero soy Karina, lo siento pero esa es una Panasonic Lumix FZ50?? -ella abre ligeramente los ojos y me mira atentamente antes de sonreirme con entusiasmo-

-Exacto, eso es, ¿te gusta la fotografía? -sus ojos mostraban un brillo de ilusión- me llamo Ángela Weber

-Me fascina -mi sonrisa se ensancha dejando atrás la incomodidad que me ha estado acompañando durante el día dando paso a mi yo apasionado por el arte- me hace sentir bastante bien

Ahora mismo podría decir mil cosas sobre cómo me hace sentir la fotografía pero siento que sería abrir demasiado mi alma a personas que acabo de conocer.

Ella me observa alegremente mientras siento la mirada del resto sobre mi, a pesar de que les oigo hablar entre ellos perfectamente como si nada estuviera pasando, como si el hecho de que te acosen con la mirada por aquí fuese lo más normal del mundo, cosa que por lo que he experimentado me temo es cierta.

El bullicio general era lo único que oía, aunque no le presto mucha atención. Jessica me manda miradas recelosas ante la atención que recibo, Mike babeaba a mi izquierda, Angela me hablaba del periodico escolar y Eric intentaba alejar a Mike de mi dejando en claro que probablemente no me gustaría que se me pegara tanto acabandonos de conocer, cosa que le agradezco.

Pero todo se vuelve más silencioso de un momento a otro, hasta la mesa se ha quedado ligeramente más callada salvo por el mini "grito" ahogado que ocasiona Jessica, miro de forma interrogante a Ángela pero antes de que ella diga nada Jessica se gira hacia mí cual niña del exorcista, me observa dejando atrás su hostilidad reemplazandola por una emoción creciente.

-Vienen los Cullen -me informa con una sonrisa comparable a la de Cheshire, el gato de Alicia en el país de las maravillas -

A mi mente vienen Emmet y Edward

-¿Y? -no entiendo tanta emoción solo por unas personas, ¿acaso son famosas?-

-Mira y entenderás -su mirada se vuelve maliciosa junto a su tono de voz-

Me fijo en la entrada y en ella aparecen una mujer rubia hermosa junto a Emmet, ella es alta e intimidante, tiene un aura sensual que la rodea, sus tacones se escuchan de forma firme marcando su fortaleza, su paso seguro y determinado me hace tragar en seco, Emmet cuenta con la misma seguridad pero a diferencia de ella él solo intimida por su aspecto, no por su aura, él tiene una más juguetona

-Ellos son Emmet Cullen y Rosalie Rosalie Hale, parecen y son dioses inalcanzables, y están juntos, si, como lo oyes JUNTOS, ¿no te parece raro? en fin, son hermanos -Jessica comentaba mientras jugaba con la comida como si no hubiera dicho la gran cosa-

-Jess, ellos no son parientes, recuerda que todos en la familia son adoptados
-Sí pero viven juntos, es raro -se encoge de hombros-

Yo no digo nada mientras vuelvo a mirar a la pareja, ellos también me están mirando, rápidamente aparto la mirada sintiéndome avergonzada

"te atraparon, ole tu y tu disimulo"

La puerta vuelve a sonar dando paso a otra pareja.

Siento que mi corazón deja de latir y que me sudan las manos que inconscientemente han vuelto a clavarse en la palma sobresaliente de mi sudadera. La pequeña chica con aspecto de hada camina hacia delante con mucha gracia y delicadeza, su pelo negro como el carboncillo tan alocadamente escalado contrastando con su piel de porcelana danza al compás de sus pasos, sus ojos dorados relucen con su sonrisa.

"Estoy jodida"

Por si fuera poco, en un inutil intento de no perderme en ella demasiado tiempo intento fijarme en su acompañante...

"Soy imbécil, no me escondo"

Un hombre de piel pálida la sigue muy de cerca, tiene el pelo rubio, no tan claro como el de Rosalie pero si que tienen mucha semejanza, sus ojos negros no van más allá de la pequeña hadita aún así gracias a mi posición puedo verlos con claridad, es bastante alto y su postura rígida propia de un militar para muchos puede desprender algo de miedo o inquietud pero a mi la verdad me parece bastante atrayente, había visto chicos guapos antes pero la verdad es que nada se compara con él, parece tenso como si le doliera estar ahí, sin embargo se nota que se siente más relajado con el toque de ella.

Me siento tan hipnotizada por ambos que se me escapa un suspiro, más alto de lo que me hubiese gustado ya que escucho la risita burlona de Jess

-Esos son Jasper y Alice, también estan juntos, una pena ¿no? -simplemente me encojo de hombros volviendo mirarla-

Dirijo por segunda vez la mirada hacia la pareja encontrándome con sus miradas, me pongo nerviosa y puedo apostar que también me pongo muy roja, siento que pueden ver a través de mi, hay mucho anhelo y cariño en su mirada, y aunque eso me confunda no importa. Una parte de mi siente que puede verse en tercera persona y se a ciencia cierta que yo les miro de la misma manera. La parte más racional de mi cerebro me recuerda que no los conozco, que no sea estúpida, que no caiga por una pareja... pero esa vocecilla es mucho más pequeña que los sentimientos que siento que me transmiten los dos, aunque lo más probable es que solo sea un reflejo de los míos...

"Definitivamente estás jodida tía..."