Alice la vio venir y advirtió a Jasper sobre su nueva compañera, más ella no lo hizo, sin embargo no le importó caer para o con ellos, ella, una humana sin nada que ofrecer, hizo que los corazones no latentes de Jasper y Alice de aceleraran, y no es...
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Agridulce, esa es la sensación que no abandona mi cuerpo tendido en la cama de mi habitación. El cambio es agrio, la futura rutina es agria, la incomodidad de las miradas es agria...sus miradas son dulces, sus voces son dulces, su gentileza es dulce. El resultado de esa mezcla es intenso en mi interior, tanta contradicción me frustra e irrita en exceso.
"Culpa a las hormonas"
un leve gruñido retumba entre mis labios cerrados y lanzo mi almohada al otro extremo de la habitación.
Agarro el móvil y marco el número de la persona que está irreversiblemente condenada a aguantarme hasta el día que muera.
"Al menos no soy la única desgraciada"
Olvidas con frecuencia que somos la misma persona...
"Debatible"
Pongo los ojos en blanco y finalmente el sonido de tonos cesa y escucho su voz grave y aterciopelada
-Hola cariño -el tono alegre y juguetón de Neisha me saca una sonrisa-
-Hola Neisha -suelto un suspiro-
-Vaya, percibo que tuviste un buen día -No la veo, pero sé que sonríe-
-Soy estúpida -hago un puchero-
-Hay una línea muy fina entre ser estúpida y hacer estupideces
-¿Una persona estúpida no hace estupideces?
-A ellos no se les puede culpar, no saben hacer otra cosa, por algo son estúpidos -No puedo evitarlo y suelto una leve risa-
Apesar de su apariencia dura y oscura para mi ella en muchas ocasiones ha sido mi faro de luz, mi voz de la razón
"Me siento ofendida e infravalorada"
-Es que me ha pasado algo raro
-Soy toda oídos cariño
-A ver...es que hay dos personas que me llaman la atención, no te puedo decir que me gustan, "mentira", porque no los conozco pero siento que todo mi cuerpo se siente atraído de una manera bastante intensa e irracional por dos personas, es decir, es mi maldito primer día, no me puedo interesar en nadie, pero no puedo evitar sentir esa cuerda que me tira de manera insistente hacia ellos. Creí que al despedirnos a la salida del aula y ya no verlos se pasaría pero mis pensamientos no van a ningún otro lugar que no sea ellos, es muy frustrante.
-Tiratelos
-¿Q-que?
-Tiratelos y si esa sensación sigue después entonces sí, tienes un problema, sino eres simplemente una adolescente -su voz es tan obvia que me deja atónita-
-Neisha...-un ligero suspiro escapa de mis labios-
-Venga no me vengas con rollos puritanos -se perfectamente que ahora mismo ha puesto los ojos en blanco-
-No es eso, es que son pareja -formo un puchero-
-Mejor, un trío, más interesante
-¡Neisha! -la sangre me sube a las mejillas-
-¿Cuál es el problema? Estamos en pleno siglo veintiuno, los tríos son muy comunes
-El problema es que si ya de por sí con uno solo de ellos mis probabilidades son básicamente nulas, ni te cuento con dos.
-...
-¿Neisha?
-Por estas cosas si que te daría una bofetada...
"Ojalá yo pudiera Neisha, ojalá"
-Oye...
-Ni oye ni nada, eres mi constelación más brillante cariño, por favor, para de infravalorarte -una tierna sonrisa invade mi rostro-
-Y tu la noche que me calma
Desde que somos pequeñas siempre nos hemos referido así la una a la otra, Neisha significa noche y mi nombre es en honor a una constelación.
Siempre he pensado que ese nombre le viene como anillo al dedo, sin duda Neisha es la viva imagen de la noche, su pelo oscuro intenso y sus ojos azules intoxicantes e hipnotizantes junto a su ropa con tendencia a ser ancha y oscura la complemente en su totalidad.
-Mira cielo, tú podrías estar con quien te dé la gana, si solo has estado con el imbécil de Áxel es porque no has querido más, cosa que a día de hoy aún no entiendo -ya empezamos...-
-Áxel es simpático, aún me llevo bien con él
-Tiene el cerebro en la polla Karina
No puedo evitarlo y rompo a reír
-Bueno, tiene una buena herramienta...
Hay una breve pausa mientras escucho su risa
-Mira, te doy un consejo, espera, deja que todo siga su curso, al fin y al cabo, si estás tan segura de que solo es una atracción es solo cuestión de tiempo que pases página ¿no?
Si tiene razón, esto se me va a pasar, es solo atracción, una bastante justificada teniendo en cuenta que no todos los días se ven a dos dioses griegos. Puedo ser su amiga, simplemente su amiga...
"Auch"
-En fin ¿Tú que tal?
-Sigo respirando y soportando a la raza humana
"Amo a esta chica"
Cullen
En casa de los cullen todos se vieron afectados por las emociones que proyectaba el sureño, su sonrisa no abandonaba su rostro y eso fue algo sumamente extraño para todos en la casa excepto para el pequeño duende, ella se encontraba igual.
El tiempo es cruel pero siempre sigue su curso, y en él, después de tantos años al fin la había traído a ella, todo en ella le fascinaba a los vampiros, no solo por su belleza, sino por su inteligencia.
Si tan solo se hubiera girado en clase de literatura, aunque solo fuese por una fracción de segundo, Karina habría podido ver la mirada de adoración que ambos tenían puesto en ella nada más habló, la de ternura cuando levantó tan tímidamente su mano, tal vez incluso albergaban la esperanza de que ella pudiera detectar el anhelo de su cercanía.
-Quiero saber más de ella, quiero conocerla amor -el puchero que formó Alice derritió al soldado, ella siempre lograba cautivarlo-
-Lo se, yo también ansío conocerla, pero debemos ser pacientes, ahora ya está aquí, solo falta cortejarla -una sonrisa más pícara se extendió por su rostro mientras sentaba a Alice en su regazo de manera que quedó a horcajadas sobre él- confía en tus visiones, la has visto con nosotros -su voz apenas era un susurro-
Alice sonrió y besó de manera lánguida al soldado moviéndose ligeramente mientras este pasaba de sujetar con fuerza su cintura a dirigir sus manos cada vez más y más abajo apretando con fuerza, Alice suelta un jadeo y Jasper en un movimiento rápido y seguro la tumba en la cama quedando él sobre ella sin apoyar todo su peso, sus manos se pierden en la estructura de la pequeña y esta sujeta de manera firme el pelo en la nuca del Mayor.
Ambos estaban excitados, y la idea de que no dentro de tanto completarán el vínculo con su otra compañera no era de ayuda para calmarse...
Y mientras en la habitación de la pareja se desataba una guerra de lenguas y deseo en otra habitación al final del pasillo un pianista frustrado y solitario maldecía y tocaba las notas del piano impregnando de rabia a claro de luna. La última nota suena de forma bruta y con rapidez, la misma que utiliza para marcharse por la ventana con unas intenciones que hubiesen sido detenidas si la hadita se hubiera percatado de su decisión o si Jasper hubiera notado la amargura tan intensificada que desprendía su hermano....
