Nos hiciste esperar mucho tiempo...

Especial *Neisha*

¿Todo esto ha tenido algún sentido?

Dejarme, herirme...¿Para que? ¿Para luego volver como si nada casi siete meses después?

-Que asco...-susurro-

Sinceramente estoy bastante cabreada, ni siquiera he querido ir a casa de los Cullen.

No quiero verlos.

La Push de noche es muy bonita, se me ha hecho costumbre venir por aquí a estas horas, donde la luna se refleja en el agua y la mar hace que la imagen se distorsione, alguna de estas noches tendré que traer a Karina, se que le encantará fotografiar esto, creo que esa fue una de las razones por las que convertí este lugar en mi refugio cuando ella de fue, pensar que le encantaría mirar esto también.

Camino con los pies descalzos por la orilla.

Se que no voy a poder dormir.

De lo único que me ha servido el día de hoy es para que mi odio hacia Edward crezca por lo que le hizo a Karina y a su relación, confirmar que Bella ha estado jugando con Jacob todo estos días porque anda que no le ha faltado tiempo para olvidarse de él cuando Edward ha vuelto incluso si han estado a punto de besarse, y para saber que tendré que volver a enfrentarme a la rubia y al oso.

Suelto un suspiro sintiéndome cansada.

¿Que puto se todo tiene todo esto?

-Que asco da estar viva de verdad...

-Y que lo digas -me responde una voz muy conocida de forma burlona-

Me giro encontrándome a una Leah sentada sobre una manta.

-Has tardado más que de costumbre -comenta despreocupadamente-

La primera vez que vine aquí a esta hora la encontré de casualidad, luego de vivieron encuentros planeados donde nos pasábamos las noches hablando de cualquier cosa o de nada, simplemente una al lado de la otra.

Sonrió ladinamente.

-¿Teníamos una cita y no lo sabía? -pregunto en tono burlón-

Me devuelve una sonrisa.

-Eres tú quién no me la pide -se encoge de hombros-

Río mientras niego con la cabeza y me encamino hacia ella, sentándome a su lado.

-Lo haría si no fueses hetero -me siento a su lado-

-Me gustas y yo también a ti. -dicta- eso no es muy hetero de mi parte ¿No?

Acerca su rostro al mío y siento su aliento chocar contra mis labios, sus ojos negros escanean mi rostro, buscando cualquier indicio de aprobación para acortar definitivamente la distancia. Cuando nuestros labios se rozan ligeramente me viene a la mente un dejà vu de la primera vez que la besé, se sintió bien, pero por alguna razón no correcto.

Si, tú me gustas,  pero amo a Rosalíe y Emmett, yo puede que te guste pero aún amas a Sam.

Y por eso mismo, no fue correcto.

-Tal vez te guste pero no te atraigo -dicto yo ahora alejándome sin irme de su lado- tienes la desgracia de que no te atraigan las mujeres también -afirmo segura- aunque me otorgo el mérito de haberte hecho dudar de tu sexualidad por un tiempo -hablo con arrogancia-

Resopla.

-Si lo haces, si me atraes -insiste-

-Te engañas a ti misma porque sientes que soy lo que necesitas para sanar, me utilizas como escudo, quieres que tome el rol de salvadora en tu vida, la que te demuestre que nunca amaste verdaderamente a Sam porque yo te haré sentir muchísimo más pero Leah, la cosa es que si lo amaste y aún lo amas -le digo sincera-