CAPITULO 10

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ADELAIDA

Despierto gracias a la luz del sol entrando por la ventana, olvidé bajar las cortinas anoche. Me siento estirando los brazos, dormí como una bebe, en verdad este colchón es demasiado cómodo, podría invernar aquí sin problema alguno o hacer otras cosas con el señor Cavill...la segunda opción me gusta más aunque veo más probable la de invernar sinceramente.

Río por mis pensamientos tontos, me bajo de la cama para ir directo al baño en donde tomo una ducha y hago mi aseo personal, una vez salgo me visto con una falda negra corta de tiro alto, blusa de manga larga suelta la cual cubre pero queda corta, aún así no se me nada gracias al tiro de la falda, en los pies me pongo tacones negros de nueve centímetros, me pongo un poco de maquillaje y el cabello me lo dejo al natural.

Al salir de la habitación no veo a mi jefe por ningún lado, ni siquiera se si llego ya que me quede dormida para no caer en tentación con el, o más bien no comenzar a provocarlo por que lo único que quiero desde que tuvimos esa noche es repetir lo qué pasó.

Toco la puerta de su habitación tres veces, inmediatamente obtengo respuesta así que entró, está de pie frente a una mesa de planchar, se ve consternado, como si no supiera lo que está por hacer.

Se gira para mirarme, siento mi intimidad palpitar cuando sus ojos me recorren de arriba hacia abajo lentamente, al terminar clava su mirada en la mía dedicándome una pequeña sonrisa.

Intento no mirar más allá de sus ojos pero me es imposible ya que solo lleva puesto su pantalón.

—Buenos días Ada— me saluda amable.

—Buenos días, ¿que hace?, ya vamos tarde para la supervisión— le informo.

—Intentaba planchar mi camisa pero es imposible, casi la quemo— suspira.

—Puedo plancharla si quiere— me ofrezco —O podría no ir tan formal como siempre, solo trabajaremos dos horas hoy, digo, me encanta mirarlo con traje pero...lo siento yo no...

—Está bien, es solo que cuando voy de prisa no tengo cabeza para pensar en cómo combinar la ropa así que opto por un traje— me explica.

—Yo le ayudó— me apresuro a la maleta sobre el sofá.

Como lo supuse esta habitación es gigante, frente a la cama hay una vista estupenda de New York y el ventanal es deslizable de forma que se puede salir a la terraza.

—Esto estaría bien— saco una playera negra y una chaqueta azul.

—¿Tu crees?

—Ajá, para no perder lo formal puede usar esos pantalones— sonrió —Lo espero afuera, no tarde— salgo antes de abalanzarme sobre el.

Diez minutos después mi jefe salí con lo que escogí puesto, tiene un aire juvenil sin perder la madurez que se carga, sonrió involuntariamente, el solo dice que está listo y ambos salimos de la habitación.

Llegamos al estudio del señor Cavill demasiado rápido, aquí solo tiene una oficina, un puesto para mi y un área de diseño para Niccolo, también una bodega en donde se guardan las prendas. Llegamos al área de Niccolo el cual se encuentra diseñando el vestido principal.

Mi jefe comienza a checar que todo esté en orden, desde los diseños hasta como los hacen, yo anoto lo que me dicta, al terminar se va a su oficina para hacer lo de el artista que él traerá, creo que quiere a Ariana Grande. Decido irme cuando le entra una llamada de su esposa.

Me paseo por el área de Niccolo un rato, después de veinte minutos vuelvo y apenas está colgando con su esposa, suelta un suspiro al aire tirando el celular al escritorio.

My Boss | Henry Cavill Where stories live. Discover now