My Boss | Henry Cavill

CAPITULO 33

HENRY

Miro de reojo a Diana mientras conduzco, ella mantiene la vista en su celular, no lo ha dejado desde que salimos de la casa y tampoco hemos intercambiado palabras en todo el camino.

Se supone que a mi lado debería de estar Adelaida cantando esas canciones que le gustan mientras se atraganta con sus donas favoritas, pero no, es mi esposa la que viene ya que a última hora decidió hacer las pases y venir conmigo.

Hubiera preferido que fuera Ada la que viniera y eso me desconcierta ya que en cualquier otro momento traer a Diana me haría más feliz que nada.

Para amenizar un poco el ambiente conectó mi celular al auto y pongo un poco de música rock de mis tiempos, canto las canciones en mi mente.

El camino es de cincuenta minutos pero siento que se vuelve eterno.

—¿Desde cuando escuchas esa música?— inquiere Diana cuando la voz de Taylor Swift cantando lover se escucha por todo el auto.

La descargue después del día del lago con Ada.

—La escuche una vez en una pasarela y me gusto— miento.

No vuelve a hablar, se dedica a mirar por la ventana.

Después de unos minutos me adentro al gran asilo donde está mi madre, saludo al guardia que abre el portón y conduzco hasta la entrada.

Es como cinco mansiones demasiado grandes juntas, todo color blanco con café y plantas perfectamente posadas.

Bajo del auto con los tulipanes que había puesta en el asiento trasero, le abro la puerta a mi esposa para que baje.

—Ag, odio el suelo de piedra— se queja.

No digo nada, solo voy a la entrada.

La chica en recepción me saluda amable, me dice que mi madre está en su habitación como siempre, desde que la internamos no ha salido de ella, cuando quieren llevarla al jardín simplemente se niega o se torna un poco agresiva.

Subo al elevador junto con Diana y una enfermera, mi madre está en el quinto piso que es donde están las habitaciones más grandes, al llegar la primera en entrar es la enfermera, después nosotros.

—Señora Cavill, el hombre de las flores llegó— mi madre gira su cabeza para verme ya que tenía su vista en la ventana.

Esta hermosa como siempre.

—Hola mamá— me acerco —Tus flores como siempre, perdón por no venir antes pero estaba ocupado.

—Gracias cariño, sigues con esa manía de llamarme mamá— ríe —Pero no me molesta.

Sonrio, me siento en la silla frente a ella, la enfermera sale d la habitación y mi madre voltea a ver a Diana la cual se sienta en la orilla de la cama.

—¿Quien es esta mujer?— inquiere mi madre en voz baja.

—Tu nuera Marianne— ella se sorprende.

—¿Algún hijo mío se separó de su esposa?— niega, va hablar pero la interrumpo.

—Ella es mi esposa y como te digo mamá pues es tu nuera— le explico, no debemos alterarla.

—Ah ya...— la mira solo unos segundos más y después sus ojos se posan en mi —Sabes, mi Charlie ya va a entrar a la universidad, ¿si lo recuerdas no?, de quien te conté.

—Claro.

Es mi hermano menor, solo dos años más chico que yo pero al parecer para ella tiene dieciocho, su mente retrocedió a ese momento.