Mi bello tormento [completa]

Capítulo 16

Brithany Morrison.

—... Y te quiero temprano —asentí a todas las instrucciones que decía mi papá.

—Estaré temprano, lo prometo.

Me di la vuelta para dirigirme a la salida. Gissell ya estaba afuera esperándome, pensé en ella para recurrir al plan B, pero no fue necesario papá me dio permiso de salir sin pensarlo tanto.

Claro está que me dio todas las sugerencias de cuidarme y todas esas cosas de padres. Asentía a todas sabiéndo de memoria todo lo que siempre me dice.

—Brithany —me detuve antes de abrir la puerta —, se te olvida algo.

Me di la vuelta para ver a mi papá. Mis ojos fueron el claro ejemplo de cómo me emocione al volver a ver la felicidad. Mi celular.

Mi papá tenía en su mano mi celular, sonreí y me acerque a él, pero papá lo levanto alejándolo de mí.

—No quiero otra escenita como lo que paso en tu habitación.

—No pasara eso otra vez, créeme estoy muy arrepentida y decepcionada de mí.

—¿Decepcionada? No fue correcto, Brithany. Pero tampoco es algo que haga sentir decepcionada.

Papá, enserio me siento decepcionada de mí.

—Te decepcioné —dije, apenada.

—Nunca me decepcionaría de ti —me entrego mi celular —. Ten mucho cuidado.

Asentí sonriendo y despidiéndome de papá.

Cuando salí, Gissell estaba jugando con una rosa que arranco del pequeño jardín, parece estresada, preocupada y nerviosa. Y un auto en color negro estaba enfrente de mi casa.

—Pensé que nunca ibas a salir —dijo.

—Créeme valió la pena la espera —dije, mostré mi celular —, me lo regreso.

—Aleluya, bendito sea. Al fin, ya me aburría sin tus platicas a las dos de la mañana.

—Pues van a volver. ¿Y ese auto? —señale el auto detrás de Gissell.

—Mi hermano me lo presto, pero si le hago el mínimo rasguño tendré que lavar su ropa por un mes, así que iremos lentos, bueno, eso espero.

—Pero no tienes tu licencia. —dije y empezamos a caminar para subir al auto.

—Evitare a toda costa los policías.

El auto era limpio y olía a perfumen masculino. De hecho, tiene la pinta de que un chico es el dueño, el olor, la sensación, la oscuridad, el ambiente que da estar aquí, todo.

—Tengo mucho pánico ahora mismo —dijo Gissell mientras hacía mover el auto —, tengo la sensación de que algo mal va pasar.

—Tengo el mismo sentimiento, aparte ya no me gusta estar siguiendo a Dereck —mire el auto de Dereck adelante de nosotros —, siento que sabe que lo vamos siguiendo.

—Espero que no, tendría mucha vergüenza ¿Me recuerdas por qué lo seguimos?

—Vamos porque no quieres que Damián participe en esas carreras.

—Le escribí diciéndole que no lo haga, no me contesto, y no me importa si se enoja, es peligroso, y siempre voy a querer verlo bien.

No dije nada porque Gissell siempre es así, ella se preocupa por todo mundo, y siempre van a estar sus amigos, familia y su novio por encima de otra cosa. Y no le importa que las personas se molesten por ella preocuparse.