37. Montaña rusa.

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Mateo

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Mateo.

― ¿Querés algo amor? ¿Un té, algo? ― Le pregunté a Cielo y negó, suspiré ― Tenés que tomar algo, levantarte, hablar con Ire que debe estar esperando para llamarte, ¿No quería hacer videollamada hoy con vos?

Asintió apenas y se acomodó en la almohada ― Sólo, quiero estar así por el resto de mi vida ― Rió sin gracia y le corrí un mechon de pelo que caía por su cara pero se puso nerviosa al instante acomodandolo ella tras su oreja.

Me senté en la cama y me abrazó, es normal que esté así, así que sólo puedo acompañarla en esto, y ayudarla, sé me ocurrió algo.

― ¿Y si lo haces conmigo? ― Pregunté y me miró confundida ― Espérame acá.

Fuí a la cocina y preparé un té, había galletas así que también llevé eso a su cuarto en una bandeja.

Se sentó en la cama ― No tengo hambre amor, gracias ― Sonrió a medias y me senté a su lado.

― Sh, déjame a mí ― Me acomodé con la taza caliente en la cama y le dí un sorbo antes de mirarla ― ¿Querés? ― Le compartí y aunque la primera vez me dijo que no mientras mirábamos la película, la segunda ya me dijo que si y logré que tomara un poco de té, mientras seguíamos concentrados en la película y yo comía una que otra galletita, compartiendole a ella hasta que inconscientemente, ella comenzó a comer sola.

No pregunten de donde lo saqué pero funcionó, aunque eso no significa que le mejoré el día, sólo hice que meriende.

― ¿Nos vamos a bañar? ― Le pregunté y se puso colorada ― Sólo bañarse, te lo juro además la bañera es incómoda para coger.

Rodó los ojos ― ¿Por qué no me sorprende tu comentario? Agarro toallas y vamos ― Dijo parándose.

Así logré que pasara de querer estar todo el día en la cama sin hablar con nadie, a que coma algo y se preocupe un poco por ella misma, aunque todavía parecía cansada y eso que durmió hasta el mediodía como nunca.

Fuimos al baño y primero se miró en el espejo suspirando y pasándose las manos por el cuello, la abracé de atrás dejando un beso en su mejilla.

― ¿Recién levantada y tan linda? Paraa ― Dije para hacerla reír y lo logré.

― No te zarpes eh, te voy a estar vigilando ― Me señaló mientras habría el agua caliente y sacarse la remera, ya que tenía sólo esa prenda puesta quedó simplemente en short de dormir, desnuda de la cintura para arriba.

lover of mine ; Trueno [Terminada✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora