- La chica nueva.
Roma O'conner vino a revolucionar el equipo de dominic toretto, y a demostrarle que ella no sigue las reglas de nadie.
Primera parte: terminada.
Segunda parte: en proceso.
Portada by me.
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NARRADOR|
—¿Qué sucedió?
Pregunto dominic cuando llegaron a la casa. Al entrar, se encontraron con todo el equipo reunido en la sala de estar con expresiones un poco difíciles de entender o explicar, eso los alarmó al instante.. Se imaginaron lo peor, no dijeron mucho tampoco y eso era sumamente extraño.
Brian, se levanta de su asiento y vacilo antes de hablar, como si estuviera pensando muy adecuadamente que palabras debía usar.
—¿Podemos hablarlo en privado? Va a ser mucho mejor.—Musitó pasando junto a dominic, para salir al jardin delantero esperando que su mejor amigo lo siguiera y eso hizo.
—Eso fue tan extraño..
Murmuro viéndolos salir de la casa mientras todos intentaban parecer desinteresados en el tema o aparentar que estaban haciendo cosas que hacían normalmente.
—Bien, ¿Pueden decirme que pasa? Están actuando jodidamente extraño y siento que me estan tomando el pelo por alguna razón.—La rubia espero una contestación, pero todos los presentes la ignoraron.—Así van a ser las cosas, lo descubriré por mi cuenta, idiotas.—Dicho eso, estaba lista para ir a hablar con su hermano.
—Roma, cuando sea el momento sabrás todo.. Pero, confia en mi.—La freno, letty.—Es mejor que por el momento esto quede entre nosotros, ya llegara el tiempo correcto para que lo sepas.
—Tenía entendido que ya era parte del equipo.. —Musitó con desconformidad, se sentía realmente feo que te ocultaran algo.— Pero veo que aun no soy tan confiable.. ¿Es por qué fui agente y puedo venderlos a cierta gente muy importante?
—Cariño, no es eso.. No se trata de confianza o algo así, dejemos el tema aquí.
La morocha le dio un corto abrazo antes de salir de la casa, sintiéndose muy culpable por no poder decirle ni una palabra a la joven que consideraba su mejor amiga.. Esperaba haber tomado la decisión correcta.
—Genial..
Suspiro subiendo las escaleras para poder meterse en su habitación, esperando poder ignorar lo sucedido hace un momento. Se sentó en su cama, viendo la foto enmarcada que tenía de jacob en su mesita de luz, le gustaba hablarle.
—No tienes una idea de lo mucho que desearía que estuvieras conmigo en estos momentos.. Extraño poder contarte mis días y escuchar los tuyos.. Poder abrazarte.
Apretó la foto de jacob entre sus manos dejando caer unas cuantas lágrimas involuntarias.. Le seguía doliendo como el primer día y sentía que el tiempo no estaba sanando absolutamente nada.
—Roma.. —Golperon la puerta de la habitación suavemente. Se apresuro en guardar la foto en el cajón y seco su rostro antes de hablar.
—Adelante.
—¿Estas enfadada?—Se apoyo en el marco de la puerta viendola con una pequeña sonrisa.
—No, tranquilo.. —Le sonrió.—De todas formas, todavía no me siento parte del equipo.. Mucho menos de la familia.
—¿De qué hablas? Eres una de nosotros, siempre vamos a ser tu familia.—Se sentó junto a ella, pasando su brazo sobre los hombros de la rubia para poder abrazarla.—Te prometo, que solo intentamos cuidarte..
—¿De qué intentan protegerme? No soy una niña, pueden decirme las cosas y las entendere.. Pero, no me gustan que me oculten cosas.. Se siente feo.
—Lo se, se que entiendes todo realmente bien y que eres una persona objetiva, pero esto es mucho más que eso.. —Apoyo sus manos ásperas en el rostro de la contraria, mirándola fijamente.
