CAPÍTULO 14.

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NARRADOR|

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NARRADOR|

Roma, se sentía extrañamente feliz. Era extraño, pero con el pasar de los días entendió que la compañía de dominic la hacía sentie bien e incluso, reía mucho cada que estaban juntos... Pero, besar a otro hombre se sentía jodidamente extraño para ella.

Mientras las semanas pasaban y su cercanía con dominic, era más fuerte e intensa, todo se estaba volviendo muy natural para la rubia y eso la hacia sentir cómoda y sobretodo, feliz.

Un suave golpe en su puerta se gano su atención.

—¿En qué piensas tanto?—Le pregunto su hermano, apoyándose en el marco de la puerta. La rubia, lo miro con una pequeña sonrisa dejando la revista que estaba ojeando aun lado.

—Siendo sincera en muchas cosas.. Demasiadas diría yo.—Confeso palmeando un lado de la cama, invitándolo a pasar.— ¿Puedo decirte algo? Llevo mucho tiempo con ganas de poder decirtelo, pero simplemente no he encontrado la situación.

—Dime.

—Gracias por irme a buscar después de tanto tiempo, por dejarme ser parte de esta familia.. Todos ustedes llegaron en el momento indicado.—Murmuro permitiendo que su hermano mayor la abrazara.

—Gracias a ti, por venir con nosotros a pesar del momento difícil que estabas pasando.—Beso su cabello con cariño, rompiendo el abrazo.

—Te quiero, brian.

—Y yo a ti, O'conner.

El hecho de volver ha tener un vinculo cercano con su hermano mayor también era una de las cosas que la hacían feliz y le daba mucha tranquilidad haber arreglando las cosas con brian.

—Te espero abajo para cenar, pequeña.

—En un momento bajo.

Le sonrió permitiendo que el rubio se fuera de su cuarto, su mirada cayó sobre su teléfono móvil que estaba sobre la cama.. Justo frente a ella, recibiendo una nueva llamada de ese número desconocido.

—¿Hola?

Atendió rompiendo lo que le había prometido a letty; no atender llamadas de números desconocidos, que con lo que ellos hacían era sumamente peligroso y podían intervenir los teléfonos de todos, o una mierda así le había dicho.

Al atender, no logro escuchar nada de la otra linea.. Pero, un escalofrío recorrió su espalda por completo.. Como en las películas y eso era muy extraño.

—¿Por qué no dejas de llamarme y ahora no dices absolutamente nada cuando te atiendo?—Pregunto con molestia, seguramente era una tontería.

Sintió la leve sensación que la otra persona iba a decirle algo, pero la voz de dominic lo freno por completo y no obtuvo nada.

—Roma, baja a cenar.—Pidió dominic abriendo la puerta del cuarto sin pedir permiso.

La llamada se corto.

—¿Todo en orden, roma?

—Si, claro.—Lo miro sacando su mirada del teléfono, no sabía que un mensaje podía hacerle sentir tantas emociones juntas.—Ve a cenar, yo ya comí algo y no tengo tanto apetito a decir verdad..

—Vamos, o'conner tienes que bajar a comer algo.

—Estoy bien de todas formas, la comida de roman no es tan apetecible que digamos.—Intento sonar relajada como siempre.

—Esta bien, cualquier cosa estaremos en el piso de abajo

—Bien, yo estaré aquí..

Cuando el contrario abandono la habitación con dudas, volvió a prestarle atención a su teléfono viendo los demás mensajes.

Simplemente no podía reaccionar.

>>> O'conner, ven a casa. Estoy cansado de buscarte por cielo, mar y tierra.

>>> Ellos lo sabían, no puedes decirles esto.

>>> Ven, te extraño.

THE NEW GIRL-  D. TORETTO ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora