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-Fue increíble el trabajo, felicidades -me abrazó Peter-.
-Jajaja gracias, supongo -le dí un par de golpes en la espalda y se separó-.
-Hacia mucho no te veía así -Diana me tocó el hombro-.
-No sabes, tenía unas ganas de pegarle al idiota de Zac -dijó Jones-.
-Estoy bien.
-Nadie hablará de mi? -soltó una risa-.
-Lo hiciste bien, gracias por apoyar, Ian -le dió la mano Peter-.
-Lo hiciste bien -dijo Diana-.
-Si, trabajan bien juntos -nos tocó el hombro a cada uno Jones-.
-Bueno, no me lo tomen a mal, pero debo ir a la oficina a entregar este hermoso vestido -me tallé los ojos-.
-Claro, les trajimos el auto, aquí tienes -me dió las llaves-.
-Gracias -caminé al auto-.
-No me vayas a dejar -se colocó a mi lado-.
-Fuí muy obvia? Ups -hice una mueca y le lancé las llaves-.
-Eres muy mala -abrió su puerta-.
-Soy malévola -subí al auto-.
-Y... Que hacemos? -prendió el auto-.
-Ir a la oficina. -dije obvia- Debemos hacer un expediente y regresar la ropa.
-Oh... Ya me había acostumbrado -hizo una mueca mientras aceleraba-.
-Que triste -lo miré de abajo arriba-.
-Y luego?...
-Ire a dormir -miré el paisaje-.
-Segura?...
-Si, porque no dormiría -levanté los hombros-.
-Creo que debemos hablar...
-No.
-No creo que sea bueno que vayas a casa sola... -no contesté- Siento algo de miedo que algo pase y estés sola.
-Vivo con una señora mayor, no moriré.
-La ves amenudo? -no contesté- A eso me refiero, puede que vivan juntas pero no están juntas.
-Cálmate, quieres?.
-Me preocupas.
-No nos conocemos hace mucho, deja la supuesta preocupación por quedar bien.
-Me preocupo, genuinamente.
-Entonces deja de hacerlo -levanté los hombros-.
-No puedo hacerlo tan fácil...
-Entonces preocúpate por alguien más y déjame en paz -soné cortante-.
-No lo haré -levantó los hombros-.
-Disculpa? Quién te dio permiso para meterte en mi vida? -lo miré enojada-.
-Lo hago porque me preocupo.
-Ese es tu problema, no es mío. Mantente profesiónal y ya.
-Es fácil para ti decirlo? -me miró- Eso le decías a Neal?.
-Me quedé helada- No digas su nombre.
-Por que? Esta muerto, los muertos no pueden lastimarte.
-No lo está, -suspiré- eso creen los demás porque son idiotas, prefieren creer que Neal murió y no que fue lo suficientemente inteligente para huir de la policía, de un país.
-No lo entiendo...
-Neal no está muerto, fingió su muerte.
-Esto suena a las historias conspirativas que dicen que Michael Jackson está vivo en París, o que Hitler huyó de la segunda guerra y no murió.
-Dios... No lo estoy inventando, lo estuve persiguiendo por todo el mundo, tenía sus alias, tenía a hackears ayudándome...
-Tenias?.
-El las borró... Me dio algo para que durmiera y borró todo lo que tenía de el.
-Por eso no has viajado? -lo miré- Me dijo Peter que podía existir la posibilidad que me reasignaran con Diana si viajabas... De forma indefinida.
-Lo intenté, pero fue imposible... El era más inteligente que yo... Aún lo es -suspiré-.
-No te has cansado de persiguir a un fantasma? Literalmente.
-Lo amé mucho, no tengo a nadie más... Mis padres murieron, eran hijos únicos igual que yo, mis abuelos murieron... Estoy sola.
-No estás sola...
-No puedo decirles a todos lo mal que me siento, Diana tiene a su novia, Peter una familia, Mozzie tiene mejores cosas que hacer, no soy cercana a Jones... Solo con Neal podía hablar...
-Y yo? -me miró-.
-A ti te acabo de conocer, olvídalo.
-Ya me estás contando cosas de tu vida, esto no es charlar?.
-No, solo soy poco profesional al compartir esto.
-Con Neal eras poco profesional, como empezó?.
-Que? -miré el paisaje-.
-Lo suyo.
-Suspiré y mire mis dedos jugar entre si- Peter necesitaba atrapar a alguien, pasó mucho tiempo persiguiendo a Neal.
-Como lo atrapó?.
-Neal se fugó de la cárcel, se enteró que Kate no lo iba a esperar... Ella era su gran amor, el amor de su vida.
-Y?.
-Una cosa llevo a la otra y al final Peter le consiguió un trato. El ayudaba a cerrar casos y le concedían reducir su condena y la libertad... Pero, necesitaba llevar una tobillera.
-Con GPS, supongo? -asentí-.
-Cuando llegó le coqueteó a todo el mundo, a Diana, a la secretaria, a mi... Siempre me mantuve al margen, no conversé mucho con el, no le dí mi teléfono...
-Pero...
-Una noches necesitaba repasar un caso, fuí a su casa, me preparó una cena y cuando iba a salir me besó... Solamente no pude negarme... Pensé que iba a ser solo atracción física, el es muy guapo y está buenísimo...
-Pero...
-No fue solo una noche, teníamos citas a escondidas, me hacía señas obscenas con la taza, me tocaba discretamente, en las reuniones se sentaba a mi lado y me tocaba por debajo -solté una risa triste-.
-No te puedo imaginar...
-Después del funeral cambié... Era más alegre, llevaba bolsas divertidas igual que atuendos lindos... Antes me hacía mucha ilución llegar a la oficina sintiéndome linda...
-Por que lo dejaste? -me miró-.
-Ya no me hacía feliz... Nada me hacía feliz, en realidad. Dejé de ir a fiestas, dejé de vestirme lindo, dejé de sonreír, no me sentía viva...
-Te sigues sintiendo así?...
-Si, me siento sin vida... Pasó más tiempo llorando que durmiendo. -reí mientras una lágrima salió- Antes bebía mucho...
-Pensaste ir con una psicóloga?...
-Lo pensé pero nunca lo hice... Todo el mundo está mal de la cabeza, por que sería yo diferente?.
-Porque...
-No hables. -levanté una mano- No fui a trabajar unos meses, luego me dí de baja en el trabajo, temporalmente, mientras viajaba persiguiendo a un hombre que no quería ser encontrado.
-Adivino, no lo encontraste.
-Si, una vez... Pero nadie me cree, ya acepte que soy la loca de la oficina.
-No lo eres.
-Lo soy, todo el mundo me mira como si un día entraré con un cuchillo lleno de sangre -levanté los hombros-.
-No... Solo no saben cómo tratar contigo, tu nueva tu.
-Mi nueva yo no le interesa lo que piensen, no tengo alma, nada me importa -lo miré y levanté los hombros-.
-Algo te debe preocupar...
-El cambio climático, pero si muero joven no será mi problema.
-No habló de eso... Te debe preocupar Mozzie.
-Me preocupa que si algo me pasa se vuelva loco... Lo único que unía a Mozzie y Peter era Neal... Ahora soy yo.
-Como?.
-Ambos necesitaban a un Neal, yo me convertí en eso, y ellos igual.
-Deben ser cercano...
-Lo somos y no, lo que nos unió fue la ausencia de Neal... Fuera de eso... Aprendimos a tolerarnos.
-Debes sentirte sola.
-Eso dije, estoy sola. -lo miré- Me escuchas o solo fingen hacerlo?.
-Sonrío y tomó mi mano- No estás sola, puedes sentirte así, pero no lo estás. Tienes a Diana, a su novia, Peter, su esposa, Mozzie... Y a mi... Si quieres.
-Esta es tu forma de ganar puntos con la jefa? Porque es terrible -quité mi mano-.
-Lo digo de verdad... En narcóticos ví a muchas personas perdidas, en más de un sentido.
-Con los polvos que han de consumir... -levanté los ojos-.
-Tu no tienes esa mirada muerta, solo estás perdida.
-Y? Tienes un mapa? -lo miré irónica-
-Puedo serlo, como tú te convertiste en un Neal...
-No digas que te convertirás en mi mapa, no lo digas -tape mi cara con mis manos-.

El clima era frío, ya era cerca de la una de la mañana, no había ningún carro aparte del nuestro. Las luces parcialmente iluminaban, las sombras que se hacía era hipnotizante. Los ruidos eran delicados, sin contar el ruido del motor.

Puntos Suspensivos.Where stories live. Discover now