Capítulo 33

7.1K 785 76
                                    

Vittorio

Es de mañana cuando tocan la puerta de la habitación. Me dirijo hacía esta y la abro. Quedo sorprendido al verlo parado en el umbral.

- Buenos días. - dice levantando una mano y sacudiéndola en forma de un saludo.

Si no fuera quien es, creería que esta nervioso. Pero se que es una tontería pensar que alguien como él podría estar nervioso por algo.

- Buenos días. - le devuelvo el saludo, aún quieto en el lugar, sin conseguir moverme, ni apartar mi mirada de la suya.

Me invade el recuerdo del día de ayer. Esa enorme necesidad que tenía de estar junto a él. No quería que me dejara. De alguna forma me sentí más seguro y tranquilo a su lado. Al regresar solo a la habitación me invadió una sensación de frío y soledad que hacía un rato que no sentía. Y lo curioso es que no lo sentía desde que llegue aquí hace unos pocos meses.

- ¿Cómo... cómo te encuentras? - pregunta. 

Meneo la cabeza. - Sobreviviendo. Supongo. - respondo. Hace una mueca. Le dedico una leve sonrisa, a lo que él me mira con sorpresa por un breve segundo y luego me devuelve la sonrisa.

- ¿Crees que podríamos hablar por un momento? - me pregunta.

- Si, claro. - respondo.

- Bien. Después de que desayunes te espero en la biblioteca, ¿si?

- No quiero que esperes, si prefieres hablamos a ahora.

- No comes nada desde ayer. Ve a desayunar, Vittorio. - dice con voz firme. - Te veo luego. - se da la vuelta y se aleja.

Cierro la puerta y apoyo mi espalda y mi cabeza sobre está. Quedo un rato así. Con mi corazón latiendo con fuerza. 

¿Por qué siempre me pongo así cerca suyo? 

Tengo que controlarme, maldita sea. 

Una vez que termino de vestirme, salgo de la habitación y bajo. 

Me cruzo con Novak apenas entro al comedor.

Y al ver su rostro se me instala en el pecho una angustia, porque recuerdo lo ansioso y nervioso que estuvo hace unos días atrás, organizando todo para esa reunión con su familia, tan importante para él y Amir, y yo se los arruiné con mis dramas. 

- No sabes cuanto lamento todo el lío que ocasione ayer. - comienzo a decir con rapidez. - No fue mi intención arruinar el día especial tuyo y de Amir. Como dije, soy una mi...

Me sorprendo cuando se apresura a tirarse sobre mi, abrazándome. Quedo petrificado.

- Nos has dado un buen susto. - aparta su rostro, sin soltarme. - Estábamos muy preocupados por ti. - continúa. Yo sigo mirándolo estupefacto. - Quería verte, pero Izan nos prohibido que nos acercáramos a tú habitación. Dijo que no te molestáramos. Así que decidimos darte espacio. - me mira apenado. - Se que es tonto preguntar, pero ¿Estás un poco mejor?

- Sorprendente si. - digo con honestidad. Me sonríe dulce. Suspiro. - Sabes, estuve pensando... Y creo que será mejor si no voy a la boda. Yo y todo mi drama estaremos mejor aquí.

Toma mi rostro entre sus manos y me sacude levemente. - Deja de pensar tonterías, Vittorito. - dice. Me suelta y se dirige hacia la salida. - E irás. - me apunta con el dedo. - No te libraras.

No puedo evitar sonreír.

***

Luego de desayunar, me dirijo hacia la biblioteca. Me quedo parado allí parado, sin moverme, con mis nudillos en alto, a tan solo unos centímetros de que estos toquen la madera. 

Hijo de la Mafia (Mafia Marshall IV)Where stories live. Discover now