❤️ Capítulo 14🩹

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POV Xiao Zhan ❤️

- Mañana es el cumpleaños de mi pequeña Mei...- resoplé mientras bajaba la mirada. -Extraño tanto a mi pequeñita-

- Bueno, entonces me imagino que irás a buscarla - JiYang me señaló - Es lo menos que puedes hacer, o es que acaso ¿dejarás que siga cumpliendo años y así ella se olvide de ti?, ¿Qué pretendes Xiao?

Desde que JiYang se enteró de todo mi pasado me ha querido matar, cortarme la cabeza, las piernas y las bolas para no dar más descendencia.

- Vamos a comprarle sus regalos a mi sobrina - se levantó animado. Sinceramente agradecía que mi amigo esté ahí, de lo contrario no hubiera tomado el valor de tomar la decisión y por fin, después de muchos años, ir a ver a mi hija.

- Tengo que hablar con Ziyi – dije casi en un susurro.

YangYang, como era de esperarse, me dio fuerzas para poder cumplir con mi objetivo

- ¡NO! - dio un golpe al escritorio - Tú no tienes que hablar con ella ni pedirle permiso, me has dicho que ella siempre te ha detenido, pues está vez yo no lo dejaré, así que levanta tu trasero y vamos de compras- era mejor hacerle caso, por qué mi vida pendía de un hilo.

Hablé con Ziyi, le conté de mi decisión. Sabía que íbamos a discutir, pero esta vez no me iba a dejar convencer.

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Llegó el día, JiYang había averiguado dónde seria la celebración de Mei. El FBI tenía que temblar ante él, bueno, no realmente. Era fácil saberlo, en una de las llamadas de negocios con mi padre, pudo escuchar las últimas coordinaciones que hacían para la decoración de la fiesta.

HaoXuan y JiYang me mandaron con su enorme regalo, Ziyi decidió a última hora que me acompañaría. Quise negarme, pero la verdad, no tenía intención que nada ni nadie malogre ese día tan especial para mí, sólo le pedí que sea cautelosa y guarde distancia de ambas familias.

Subimos al auto y veinte minutos más tarde ya habíamos llegado a mi casa, bueno a la de mi familia. Estaba muy nervioso y dudé un momento en bajar, las manos me sudaban y comenzaba a sentir un calor sofocante. Me desaté el nudo de la corbata y desabotoné el primer botón de mi camisa.

- Si quieres no entrar, dímelo y solo dejo los regalos – Su voz fue suave, pero sentí la intención de hacerme retroceder en el tono de su voz.

- Ya lo hablamos Ziyi, voy a entrar, solo estoy un poco nervioso- Me volví a abotonar la camisa - No me preocupa la reacción de nadie en ese lugar, sólo la de Mei, estoy seguro que mi hija debe estar hermosa. Espero que, aunque sea, pueda recordar mi voz...- Terminé de anudar la corbata y bajé-

- Si no quieres ir conmigo espera aquí en el auto o vete – saqué las llaves, tomé los regalos y cerré la puerta.

Estando a un paso de tocar el timbre, escuché la puerta del auto abrirse y Ziyi apareció inmediatamente detrás de mí.

–Recuerda lo que te pedí, por favor- Toqué el timbre y a los pocos segundos, me atendió una de las sirvientas. Su cara fue de espanto, juraría que había visto a un demonio o un fantasma.

- Usted no puede entrar - dijo con un tono entre nervioso y molesto.

- ¿Disculpa?, tú no eres quién para prohibirme entrar a mi casa- la hice un lado – Permiso -

Di dos pasos adentro y vi como la chica corría presa del pavor, solo negué con la cabeza. – "Espero que no se haga todo un escándalo de esto" - pensé

El amor no es como lo pintan - ƶɦαɳყเWhere stories live. Discover now