Mi único pecado, fue quererte.

Capítulo 36

El plan de Sofía había resultado más rápido de lo que ella se podría imaginar. Ahora Carlos y Marco estaban saliendo y Sofía había ganado a un nuevo amigo.

Los tres trataban de ocultar muy bien su pequeño secreto en este trío sentimental algo especial. Marco comenzó a reunirse frecuentemente con Sofía, lo que daba a entender que eran buenos amigos, y a ellos se le unía Carlos, por ser su novio. Esta era la forma en que no levantaban sospechas, siendo siempre Sofía el punto de encuentro de la nueva pareja.

Un fin de semana, estaban mirando una película en casa de Carlos. Él y su novio se estaban besando, sin prestar atención al televisor y Sofía pensaba.:

~Se parecen a mí y a Jorge cuando recién comenzamos a salir... ¿Jorge?... de hace mucho que no pensaba en él... ya ni siquiera recuerdo como era.

Habían pasado más de 3 años y medio, en realidad, pronto se cumplirían los 4 años desde que Jorge salió de la vida de Sofía, y para ella, el tema fue pasado. Ahora podía hablar de él, como un simple recuerdo, pero aún existían cosas que le producían tristeza y sabía que serían heridas que jamás sacarían, y era mejor guardarlo muy en el fondo de su corazón, para que se ahoguen.

Con el paso del tiempo, Carlos y Marcos, eran sus mejores amigos. Esa noche de primavera, acudieron a un bar para celebrar el cumpleaños de Marcos. En 4 meses, Sofía cumpliría 27 años y ya estaba pensando en cómo celebrarlo con alguna gran fiesta.

— Estos son los mejores cumpleaños de la vida. Aquí, bebiendo un Cosmopolitan con mi amiga y mi novio, ¿qué más puedo pedir? — sonreía Marco, timando de su bebida.

— Bueno, deberíamos aprender a hacer Cosmopolitan nosotros. — sugiere Sofía.

— Estás loca mujer, aprendamos a hacer margaritas. — dice Carlos riendo.

Todos ríen, pero pronto las risas se cortan, cuando la música del Bar donde se encontraban cambia por Uptown Girl.

Los amigos de Sofía sabían que algunas cosas estaban prohibidas, y esta canción, era una de ellas.

— ¡¡¡Hey cambia eso!!! — Marco le grita al DJ

Carlos se levanta apresuradamente y se dirige rápidamente al DJ del Bar.

Esa canción le traía muchos recuerdos dolorosos a Sofía, su expresión era triste, puesto que, de solo escucharla, le estrujaba el corazón, pero agradecía la preocupación de sus amigos.

— No es necesario... ya no me molesta esa canción — dice Sofía al ver regresa a Carlos a la mesa.

La música fue cambiada.

— Claro que sí Sofí, si no ¿por qué tu cara tiene esa mirada triste? — pregunta Carlos de manera tierna.

— Sí. Además, aquí lo queremos pasar bien y no pensar en ningún imbécil. — comenta Marco levantando su vaso.

— Correcto... salud por eso — le sigue Carlos.

— Chicos, ustedes son los mejores de este planeta — Sofía comienza a reír.

***

La junta directiva de la empresa se había reunido, puesto que se había decidido contratar a un nuevo asesor en mercadotecnia de renombre. Esta era una inversión importante, ya que sus honorarios eran costosos por su alta demanda y estaría con ellos durante 6 meses para direccionar a la empresa, y que esta pueda mejorar, con aspiraciones de ampliarse.

Esto noticia se anunció a la comisión ejecutiva, en donde participaban Sofía y Carlos, quienes deberían trabajar con el asesor para darle orientación sobre qué era lo que se esperaba y este, directamente con los gerentes, para informarles los progresos.

— Ah Sofía... ¿Sabes lo que eso significa verdad? — pregunta Carlos sentado en la mesa de conferencia.

— No... ¿qué?

— Vamos a trabajar el doble con ese tipo, ya no tendremos vida. Mi padre dice que tenemos que presionarlo para tener buenos resultados, además me contó, que saco de la quiebra a la compañía Vita y por eso lo llamaron.

— Pero Vita es famosa, es una gran empresa.

— Hace dos años estaba por caer en bancarrota. Por eso todos quieren contratarlo.

Ambos se levantan de sus sillas, para saludar al nuevo asesor que ingresa acompañado de los directivos.

— Bueno, te presento al equipo, este es Carlos. Es jefe de Marketing — Informa Federico Mydffai.

— Mucho gusto. Esperamos que se sienta bien trabajando con nosotros — Carlos le estrecha la mano.

— También le presento a Sofía, mi hija. Ella está encargada de la dirección de mercadeo y es mi mano derecha.

Sofía le ofrece la mano al hombre que tenía al frente de manera fría, sin decir nada

— Él es Jorge Iraná, trabajara con nosotros por 6 meses y esperemos que este periodo sea productivo.

— Es un real placer conocerla Señorita Mydffai — Jorge se lo dice sosteniéndole la mano y le regala una sonrisa risa.

Sofía aparta rápidamente su mano, sentía como si una ametralladora la estuviera atacando, pero debía demostrar compostura, para que no descubriera que le afectaba verlo.

Esa tarde para Sofía fue una agonía, quería correr, golpear a Jorge, gritarle, pero él se mantenía inmutable, como si no la conociera y le hablaba de manera formal y la trataba de señorita Mydffai. Incluso estaba sorprendida de que su padre no lo reconociera, y todos actuaban tan tranquilos, que pensaba que enloquecería.

Jorge había cambiado mucho, sus facciones eran mucho más maduras que cuando lo conoció en la universidad, ahora era un hombre muy atractivo, pero Sofía no podía verlo así, solo veía al hombre que la traicionó y rompió sus ilusiones, deseaba con desesperación que se fuera, para siempre.

— Sofía, hagamos algo ahora, podríamos ir a tu departamento — dice de manera alegre Marco, que venía acompañado de Carlos a su oficina.

— Hem... sí... adiós — responde Sofía distraída, sin escuchar lo que sus amigos le decían.

— Hey Sofía... ¿estás bien? — pregunta Carlos asustado de verla así.

Ella se marcha sin escuchar a nadie, mirando sus pies y saliendo apresuradamente.

Marco y Carlos se miran extrañados.

— ¿Qué tiene? — pregunta Marco.

— No sé, vamos a su departamento.

— ¿Será buena idea?

— Dijo que si, así que vamos

Tomaron sus abrigos y se marcharon apresuradamente para seguirla.