Capítulo 45

820 70 3
                                    

Al despertar, Sofía no podía ir a la empresa, no sabía qué decir o como mirar a Jorge, por un lado, quería que todo fuera como antes, pero aún mantenía su inseguridad. Volver a querer al hombre que odio por tanto tiempo y que juró nunca permitir que entrara a su vida, era algo difícil.

Durante esa tarde, recibe una llamada de Carlos

— Hola...

— Sofí... ¿estás enferma?

— Pasaron algunas cosas anoche...

— Podemos ir a tu departamento después del trabajo, si quieres.

— Prefiero ir a tu casa. Creo que Jorge podría venir aquí, y no quiero verlo... no por ahora.

— Como tú quieras. Llegaremos pronto al salir de aquí, así que te esperamos allá... bye.

Pasaron unas horas y Sofí pronto iría a casa de Carlos, cuando recibe la llamada de un número que desconocido.

— Aló

— Mantienes tú mismo número. Quería saber, si hoy no has venido al trabajo, porque tratas nuevamente de evitarme — responde Jorge apesadumbrado.

— Jorge. No sé qué responder a eso, pero no me siento cómoda hablando contigo.

— Sofía, no tengas miedo por lo que paso anoche, sé que te he puesto en una situación incómoda. Tú tienes a Carlos, pero sabes que me amas, deberías cortar esa relación, ya tu padre no se opondrá a nosotros.

— No es por Carlos, es por mí, no puedo confiar nuevamente como lo hice en su tiempo, y tú no fuiste capaz de confiar en mí cuando todo ocurrió, por eso te fuiste sin decir nada.

— Es verdad, y hay mucho que sanar y no espero que esto sea solo en una noche — Jorge da un suspiro — Solo quiero que sepas, que para mí, anoche fue muy especial, te llevé conmigo cuando regresé a mi casa. Lo que ocurrió entre nosotros fue algo más que sexual... fue una promesa.

— Creo que es mejor que eso quede ahí.

— ¿Quieres que te visite hoy?

— Será mejor que no... aún necesito mi espacio.

— Como quieras. Solo espero que cuando me vuelvas a ver, no actúes como si no me conocieras. — dice en voz baja, ya que se escuchaba preocupado.

— Adiós Jorge...

Sofía cuelga y mira el número que tenía registrado su móvil, lo ingresó a sus contactos y mientras lo hacía, pensaba que hace unos años, ella habría dado todo por tener ese número para poder saber de él, pero ya no podía seguir lamentándose por el pasado.

Cuando Sofía estaba con sus amigos en casa de su novio, les contó lo que paso anoche en su departamento, ya que necesitaba consejos.

— ¡Maldita!... cómo pudiste serme infiel — Carlos sobre exagera una reacción.

Marco la abraza de manera cariñosa, como si fuera un triunfo.

— Ay... mi pequeña princesa se ha transformado en una mujer, vamos a celebrarlo.

— ¿No creen que estuvo mal? — pregunta ella asombrada.

— Claro que no. Siempre hemos dicho que eras tonta por no entregarte antes — ríe Marco, quien le brillaba los ojos de felicidad.

— Pero tengo miedo de que se vuelva marchar. Ya me mintió una vez, podría seguir haciéndolo.

— Hablemos con lógica — Dice Carlos quitándose las gafas — ¿tú consideras que ha hecho todo lo que hace, por solo una noche?

Mi único pecado, fue quererte.Where stories live. Discover now