25

8.7K 1K 770
                                    











—Creo que nuestro padre me borró algunos recuerdos.

—¿Qué?

Jimin frunce el ceño cuando le oye, mirándole preocupado. Taehyung lo sabe por el aroma que emana, sin embargo, no le mira de vuelta.

No tiene la fuerza para hacerlo.

Ambos se encontraban fuera, realizando una patrulla bien temprano por la mañana en una de las fronteras.

Ayer había sido un largo día, haber salido de la casa de Jungkook luego de una semana de descanso, y haber tenido esa reunión con Yoongi, Yeji y el resto, lo había dejado exhausto mentalmente.

Además, estaba la conversación que tuvo con Jimin sobre su madre y el hecho de haber visto a cierto lobo rondar la tumba de Yoona.

Frente a eso último, Taehyung se siente inseguro.

Vuelve al presente, dispersando sus pensamientos y niega, intentando explicar su punto cuando tuvo el presentimiento de que su padre le hizo algo más que mandarlo a dormir por cinco años.

Porque él recordaría.

Recordaría a ese lobo.

—Siento que hay muchas cosas que no recuerdo, sobre todo el tiempo que estuve con él, cuando me quitó del lado de las brujas y me llevó a vivir con él. Antes que tu nacieras.

Esa parte de su vida se siente vacía, Taehyung piensa, tan vacía como si alguien se hubiese metido a su cabeza para arrancarle los recuerdos.

Como si alguien hubiese atravesado su pecho para arrebatarle el alma y quitarle todo.

Jimin no deja de mirarle, y Taehyung sabe que lo está asustando.

—Has vivido demasiado tiempo —intenta su hermano—, quizá no puedes ser capaz de recordar tantos años, es entendible.

—Lo recordaría —dijo él, convincente y esta vez sí se giró a mirarle, seguro de sus palabras—, estoy seguro que recordaría a...

Se calló.

—¿A quién?

Ese lobo.

A tu padre biológico.

Taehyung no fue capaz de decirlo.

—Hay algo —dijo entonces, relamiéndose los labios, nervioso—, hay algo que quiero contarte, pero quiero estar seguro —casi avergonzado, buscó su mirada, sus ojos observaron a Jimin como si sintiera culpa, culpa de algo que se le escapaba de las manos pero que pesaba sobre sus hombros de todas maneras—, ¿podrías esperar un poquito más?

Le hizo una mueca, como si le doliera pedirle algo así, a pesar de que Jimin no tenía idea de lo que hablaba, le sonrió, posando su mano en la suya, apretándola tiernamente en un intento de tranquilizarlo, dándole una mirada empática que solo él podría darle, como si no importara, como si confiara en él a ojos cerrados.

Y lo hacía.

—Claro que si —le dijo, sereno y tranquilo—, por supuesto que puedo esperar, no te agobies.

Taehyung dejó ir todo el aire que inconscientemente retenía.

Apretó los labios, como si intentara controlar las pesadas emociones que lo atravesaban y apretó suavemente la mano que Jimin le tendió.

—Gracias.

















*

















GRANATUM #2; taekookWhere stories live. Discover now