Daddy - SanWoo (Adaptación)

18

— No entiendo por qué me traes aquí. —Wooyoung se removió incómodo en la silla.

Su madre lo había llevado adentro, a uno de los salones que daba para el jardín, las puertas de vidrio le dejaban ver a Hongjoong y Yeosang jugando solos entre ellos, pero Wooyoung quería estar ahí... ellos podrían necesitar algo, ellos podrían necesitarlo y él estaba en otro lado.

Su ansiedad era real.

— Nadie les hará daño a Hongjoong y Yeosang. —la voz de su madre, extrañamente, lo tranquilizó, seguía siendo dura, pero la voz de su madre siempre le transmitía seguridad.— Es porque necesito que me escuches y que veas.

— Bien. —Wooyoung se relamió los labios nervioso.— Pero rápido...

Un pesado suspiro salió de la boca de Hyejin. — Lo siento, Wooyoung... por no poder protegerte, ni a ti... ni a Seonghwa. —el nombre hizo que el rostro de su hijo se girara de inmediato, sus ojos cristalizados, sus manos en puños.

— Mamá... —Wooyoung hizo amago de levantarse, la mano de Hyejin lo detuvo.

— No, escucha... tienes que hacerlo. —su mano hizo presión en su pierna, Wooyoung se sentó de nuevo.— Te diré qué es lo que pasó...

Los minutos pasaron, Wooyoung sentía sus lágrimas caer por sus mejillas, varias veces giró a ver a su madre... no estaba mintiendo, él lo sabía. Su madre no le estaba mintiendo.

Oh mierda.

— Entonces... —su voz ronca por el llanto.— Él... él...

— Él está aquí, conmigo... —su madre tomó su mano entre las suyas.— Él ya está con nosotros.

— ¿En serio? —un puchero en sus labios, quién lo viera no pensaría que es un adulto.— ¿De verdad?

Los ojos de Hyejin cristalizados, su garganta seca. — Sí, de verdad... Dios, por eso dije que los panqueques iban primero. —murmuró después de ver el reloj en su muñeca.— Es su hora favorita para salir, siempre le dice a Sunghoon que jueguen a esta hora.

Como si fuera un reloj.

Escuchó una puerta abrirse, su pulso yendo a mil por hora cuando lo escuchó...

Mierda.

— ¡Apúrate Sunghoon! —el pequeño llegó corriendo al jardín.— ¿Caminas lento porque eres muy grande? —rio suavemente y sus pequeños pasos se detuvieron al estar frente a Hongjoong y Yeosang.

Wooyoung vio como sus gemelos se asustaron, Hongjoong lo buscó con la mirada pero no lo encontró, así que se levantó rápidamente, limpiando su short.

— Hola, soy Hongjoong. —sonrió ampliamente.— Él es mi hermano. —dijo antes de inclinarse.

— Hola. —murmuró el menor, con sus mejillas sonrojadas.— Soy Yeosang. —le sonrió amablemente.

El mayor saltó emocionado. — ¡Hola! No sabía que iban a haber más niños. —su rostro se giró sonriente hacia Sunghoon.— Soy Seonghwa... —se inclinó ligeramente y agregó.— ¡Son hermanos! Yo siempre quise un hermano, con un hermano nunca te sientes solito.

Wooyoung se quebró.

Lloró, lloró todo lo que se le antojó mientras su madre lo abrazaba y le susurraba "lo siento" que ya no importaban... Él amaba a su madre y si antes él pensaba que era su heroína, ahora definitivamente lo era.