23

1.1K 189 39
                                    

— ¿Está listo? —Wooyoung jugaba con sus manos antes de abrir la puerta del nuevo cuarto de juego de los chicos.

A pesar de que ambos habían dicho que era innecesario, Hyejin les dijo que la dejaran hacerlo para ver a sus nietos felices antes de morir.

Juego sucio.

Ella estaba más viva que todos ellos juntos.

— Claro que no. —bufó San riendo nerviosamente.— Pero nuestros padres tienen razón... los chicos empezarán el colegio el próximo año, en el mismo preescolar... Los niños son una mierda y van a preguntar y decir cosas, es mejor que nosotros les expliquemos que serán... hermanos, a que un niñito mierda les venga a arruinar la vida y yo tenga que matarlo.

— Choi San. —Wooyoung siseó.— No va a matar a ningún niño.

— Mataré los necesarios si están molestando a mis hijos. —San bufó.— Así que es mejor que hablemos con ellos nosotros y que les expliquemos todo...

— Eso me asusta. —Wooyoung rio nerviosamente.— No sé cómo van a reaccionar...

— Nadie puede saber eso, bebé. —San tomó su mano, sus dedos pasando suavemente por sus nudillos.— Pero estamos juntos en esto...

— El equipo Jung Choi. —Wooyoung sonrió emocionado.

— Choi Jung.

— ¿Quién dice? —el menor bufó.— Yo no he firmado nada.

— Yo te lo pedí a ti. —San rio enternecido mientras el rostro del menor se sonrojaba.— Tú tienes el anillo... eres mi prometido.

San saboreó esa palabra.

Prometido.

Maldición, le encantaba como sonaba y le encantaba más sentir el anillo en el dedo de Wooyoung.

— Eso es injusto. —el menor hizo un puchero.— Usted es malo conmigo. —San rápidamente se acercó para besarlo, las mejillas de Wooyoung se sonrojaron.— Los niños nos verán... —susurró con una suave risa.— Después.

— O podemos hablar con los niños después. —exclamó San tomándolo de su cintura para juntar sus labios de nuevo y saborear su dulzura.

Los besos se habían vuelto más profundos los últimos días, se habían estado extrañando tanto... los gemelos ya tenían cuartos designados, pero estaban siendo pintados y decorados, Seonghwa les dijo que podían dormir juntos como una pijamada y ambos estuvieron de acuerdo... porque creyeron que se referían a ellos tres... no a los cinco.

Así que hasta que los gemelos no tuvieran habitaciones listas, ellos estarían durmiendo juntos y lejos, porque tres pequeños los separaban incluso de darse un beso de buenas noches.

Ellos aprovechaban momentos así, pequeños ratos donde se quedaban solos y podían entregarse por completo el uno al otro.

— Te dije que se daban besitos... —murmuró Yeosang.

Inmediatamente, como si sus labios quemaran, se separaron y se vieron unos segundos antes de girar a ver a tres pequeños que los veían, Seonghwa riendo mientras sostenía la puerta.

— Yo... —San rio nervioso.— ¡Chicos! —exclamó entrando de golpe en la habitación cargando a los tres pequeños que empezaron a reír.— ¡Los extrañamos!

Daddy - SanWoo (Adaptación)Where stories live. Discover now