¿Who is a traitor? /Yeji y tu/ /Ryujin y tu/

65: Se escribe "Amor" y se pronuncia "Familia"

----Narrador----

La joven Min miró el calendario con terror en sus ojos.Cuando era pequeña este día la emocionaba, pero ahora este día solo significaba una cosa: Su muerte.

Así es, habían pasado los días y hoy era su cumpleaños.Durante un largo periodo no vio a sus fantasmas...Bueno a una de ellas: 

Hace unos 5 días, ella había tropezado con sus propios cordones y casi se cae del puente por el que paseaba sola, pero una de sus fantasmas lo impidió y para su sorpresa no fue Yeji.El espíritu de Ryujin la sostuvo fuertemente impidiendo que ella cayera al agua, sin embargo cuando la miró a los ojos pudo ver por un segundo la expresión desanimada y triste de la fantasma para luego desaparecer.Pero esa fue la última vez que vio a alguna de las muertas.

Ahora, sentada en la cama, miro la bandeja con el desayuno que sus padres le habían preparado con amor y se lo habían llevado a la cama para que no tuviera que levantarse, lo dejó en la mesita de luz a su lado y desvió su mirada cuando vio cómo una forma borrosa aparecía en su cuarto.

Forzó la vista y la figura se aclaró, no era nada más y nada menos que —¡Buenos días cielo!— Sonrió Yeji —Hoy es el día, ¡Tu cumpleaños!— Habló con entusiasmo mientras se acercaba a su protegida.

—No me toques— Exclamó con furia antes de que su mayor pudiera dar un paso más.

La nombrada hizo un pequeño puchero —¿Hola? Hace mucho que no nos vemos ¿Y así es como me recibes?— Soltó un suspiro —Alguien se levantó de malas hoy ¿Un abrazo?— Extendió los brazos a punto de abrazarla.

Ella se hizo más hacia atrás —¿Cómo se que no me clavarás una navaja? Aléjate—.

La mayor negó con la cabeza —Oh no te preocupes, yo morí a las 7 de la tarde así que tu morirás a la misma hora ¿No es maravilloso?— Chilló de la emoción.

—¿Maravilloso?— Rió con sarcasmo —Es el último día de mi vida y por eso el peor, no sabes lo que daría por nunca haber ido a ese estúpido orfanato— Estaba enojada pero no lloraría, después de todo las lágrimas no arreglarán nada.

La sonrisa de la más alta cambió —Auch, eso dolió— Se cruzó de brazos —Pero cariño, no hay nada que puedas hacer, el destino nos juntó y ahora tenemos que estar juntas, quieras o no—.

—¡Eso es obsesión Hwang Yeji!— Gruñó haciéndose aún más para atrás, logrando que la pared toque su espalda.

Se encogió de hombros —Claro que lo es, también son las reglas— Se arrodilló en la cama, y abrió las piernas de su menor.

Esta se sobresaltó —¿QUE MIERDA CREES QUE HACES?— Gritó intentando escapar y fracasando en el intento.

—Cálmate cariño, solo quiero un abrazo— Sonrió, se posicionó entre sus piernas y la abrazó por el torso.

Min se movió en la cama con fines de escapar de ahí, pero lo único que logró fue pegarse más a Yeji, frotándose contra ella.

De repente la mayor la tomó fuertemente de las caderas, impidiendo que pueda moverse —Quédate quieta cariño, lo único que logras es calentarme— Una de sus manos la tomó del mentón, obligando a que la mire a los ojos —No quiero follarte hoy, guardemos eso para más adelante, hoy será un día tierno, soft y dulce— Sonrió.

—Oh claro, que muera el día de mi cumpleaños es la cosa más dulce tierna y soft del mundo, muchas gracias— Dijo con un obvio sarcasmo en su tono.

—De nada, en ese caso me apresuraré en darte tu regalo— Le dejó un beso en la punta de su nariz y desapareció.

La joven se quedó unos segundos en silencio.Yeji se había vuelto como una fanática obsesionada con ella.Sin darse cuenta las lágrimas comenzaron a caer por su rostro y un puchero involuntario apareció en sus labios.Agachó su cabeza y miró al suelo con una expresión tierna por fuera pero dolorosa por dentro mientras sus lágrimas caían y abrazaba sus propias piernas para consolarse.