50 | Harper

457 27 4
                                    

Si me preguntaran si la vida en pareja, casada y con un bebé es fácil ahora mismo os diría que no

Oops! Questa immagine non segue le nostre linee guida sui contenuti. Per continuare la pubblicazione, provare a rimuoverlo o caricare un altro.

Si me preguntaran si la vida en pareja, casada y con un bebé es fácil ahora mismo os diría que no.

James y yo llevamos discutiendo semanas sobre algo de lo que no nos ponemos de acuerdo, ya que los dos no queremos lo mismo, y me preocupa porque tampoco es para tanto, pero él hace un mundo de ello.

—James, esta situación ya se está volviendo insostenible. He sido paciente, he respetado tu punto de vista y, aunque no quería insistirte otra vez, creo que deberíamos...

—Harper, no sigas.

Respira hondo para tranquilizarse y retomar la conversación de nuevo.

—Ya lo hemos hablado mil veces, Charlotte tiene que ir a la guardería.

—Charlotte se queda en casa con nosotros. Además, no vamos muy bien de dinero, si apenas llegamos para pagar la casa y porque nos ayuda mi padre que si no...

—No dramatices tanto, no la vamos a mandar a un internado.

—Me da igual, es mi pequeña y se queda conmigo.

—¿Cuándo, por la mañana mientras estás en clase?

—No.

—¿Entonces?

Abandono mi posición y me acerco al sofá para sentarme al lado de James.

—James, necesito que desconectes de tus pensamientos durante un segundo y me prestes atención. Tú y yo vamos a clase por la mañana, obvio que podemos estar con Charlotte por la tarde, pero ¿y por las mañanas? No puedo perder más clase James y tú tampoco.

Sabe que uno de los dos debe ceder y por mucho que le moleste tiene que ser él, es lo más justo cuando mis argumentos son tan convincentes.

Se toma un momento para pensarlo bien y deja caer su cabeza en el respaldo del sofá, completamente derrotado.

—De acuerdo, tú ganas.

—¿Sí? —le pregunto ilusionada de que por fin haya entrado en razón.

—Sí, llevaremos a Charlotte a la guardería.

—¡Genial! El otro día hablé con Camila y me comentó que está llevando a Ethan a una guardería cerca del campus, podrían ir juntos. Imagínatelo, compañeros de guarde y compañeros de por vida.

—Deja de emparejar a tu hija con nadie, siempre va a ser la niña de papá.

—Ese puesto no te lo va a quitar nadie.

—Claro que no me lo va a quitar nadie, ya me encargaré yo de ello. Por cierto, ¿dónde está Charlotte?

—¿No la habíamos dejado jugando en su mantita?

Los dos nos incorporamos rápidamente y nos quedamos alucinando cuando vemos a Charlotte de pie agarrada al mueble de la televisión. Aunque no camina, si comenzó a gatear hace poco y eso significa que ya está preparada y que lo hará dentro de poco.

Nos levantamos de un salto del sofá y vamos corriendo hacia donde está ella por si se cayera al suelo y no nos diera tiempo a cogerla.

Charlotte en cuanto nos ve aparta una mano del mueble y la extiende hacia James, pidiéndole con la manita que se acerque a ella.

—¿Ha venido caminando hasta aquí? —me pregunta James, totalmente ilusionado con lo grande que se está haciendo nuestra pequeña.

—No lo creo, tal vez se ha desplazado gateando, pero lo hará pronto así que tenemos que asegurar todas las esquinas de la casa.

—Mañana compraré todo lo necesario, pero ahora, vamos a darle un baño a la princesa.

James coge a Charlotte en sus brazos y mientras yo preparo la bañera, él se encarga de quitarle la ropa y de envolverla en su albornoz calentito.

Pasamos una noche en familia antes de irnos a dormir. Mañana tenemos que ir a apuntar a Charlotte a la guardería antes de irnos a clase.

 Mañana tenemos que ir a apuntar a Charlotte a la guardería antes de irnos a clase

Oops! Questa immagine non segue le nostre linee guida sui contenuti. Per continuare la pubblicazione, provare a rimuoverlo o caricare un altro.

—¿Veis que bien se lo pasa? Charlotte estará bien, os lo puedo asegurar. No os preocupéis, está en las mejores manos —nos garantiza la directora del centro.

Estamos parados en la puerta de la clase de Charlotte tras finalizar el tour por el centro.

A Charlotte no se la ve incómoda con su nueva profesora y eso me tranquiliza mucho, porque no podría dejarla en un lugar en el que ella no quisiera estar.

—Louise es un amor de persona, todos los niños la adoran y los padres también.

—No lo dudamos, pero Harper, tenemos que marcharnos ya —me avisa James, mirando su reloj de muñeca.

Asiento con la cabeza y echo un ultimo vistazo a Charlotte antes de despedirnos de la directora y marcharnos. En la puerta nos cruzamos con Camila y Ethan, pero apenas nos paramos a saludarnos ya que tenemos prisa.

—¡Luego nos vemos! —grita ella, antes de pasar corriendo a la guardería.

Como me imaginaba, los primeros días no pude evitar estar inquieta mientras estaba en clase. Vivía con el teléfono pegado a la mano por si recibía alguna llamada de la guardería.

Pensaba que me iba a costar más dejar a mi pequeña en la escuela, pero me adapté igual de rápido que ella. Todo porque comprendí que es necesario y a ella también le va a hacer bien estar con otros niños.

 Todo porque comprendí que es necesario y a ella también le va a hacer bien estar con otros niños

Oops! Questa immagine non segue le nostre linee guida sui contenuti. Per continuare la pubblicazione, provare a rimuoverlo o caricare un altro.

¡Hola!

Siento mucho haber estado tanto tiempo desaparecida, pero, entre las clases y el trabajo no he parado ni un momento. Como ya os dije esta historia está apuntito de terminar. Quedan exactamente dos capítulos, pero no os preocupéis porque voy a subir una historia nueva con Charlotte como protagonista.

¿Qué os parece os gusta la idea?

Harper & JamesDove le storie prendono vita. Scoprilo ora