7 - Ramir: Sinvergüenza

118 21 6
                                    

Ramir

Mi hermano se fue muy enojado del Only Club. Espero que esté bien, aunque el que no lo está soy yo, pues me están mirando de manera intensa. Observo a Exiel, entonces me dirijo a avisarle.

―Bueno, ya me voy.

―Quédate ―pide y se mantiene sentado en la silla de su escritorio―. Quiero verte un poco más.

Me agarra un escalofrío. Así debió sentirse Zem cuando lo acosaba. Ay, cielos, ya lo mencioné otra vez. ¡Te dije que ese nombre está prohibido!

Y ahora una canción: No, no es amor, lo que tú sientes, se llama obsesión. Una ilusión, de tu pensamiento, que te hace hacer cosas, así funciona el corazón.

¡Bueno, basta!

Me quedé divagando donde no debía.

―¿No deberías odiarme? ―Enarco una ceja―. Te rompí todo el club.

―No con esa falda. ―Se ríe.

Miro el camisón.

―Sí, es cierto, no me cambié.

Vuelve a reír.

―Me encanta, pues no eres como imaginé que serías, eres mejor.

Alzo la vista y lo observo, extrañado.

―¿Y cómo me imaginaste?

―Que te asustarías, haciendo caras todas bonitas y adorables. Ya sabes, avergonzándote, todo tímido y tal, pero no, andas tranquilo con lo que te puse. Eso sí es un reto, me gustan los retos. ―Se muerde el labio inferior.

―Para vergüenzas ya tengo a mis padres, tú solo eres un rarito.

Se carcajea, luego se levanta de su asiento, rodea el escritorio, despacio, por alguna razón, y luego al fin llega hasta mí, aunque en ningún momento ha dejado de observarme.

―Lo sé ―contesta a mi acotación―. Te investigué.

―No me sorprende.

Amplía su sonrisa.

―No sabes cómo me pones.

Enarco una ceja.

―Y no quiero saberlo.

Hace una pequeña risa.

―Qué lindo eres.

―No quiero ser descortés, así que ya me voy a ir. Solo te trato bien porque todavía estoy considerando tu propuesta ―le aclaro―. Pero déjame decirte, que te estás volviendo insoportable, agotas mi paciencia.

―¿Te llevo a tu casa? ―consulta ignorando toda mi acotación.

Me lo pienso.

―No tengo casa.

―Qué honesto.

―Vivo con mi hermano y si él me ve contigo se va a enfadar.

―O sea, me hubieras dicho que sí, soy muy feliz ―expresa tranquilo.

Sonrío.

―Me gustan los caminos fáciles. 

Exiel se lo toma todo tranqui, pero Ramir no se queda atrás 😂💖

Deze afbeelding leeft onze inhoudsrichtlijnen niet na. Verwijder de afbeelding of upload een andere om verder te gaan met publiceren.

Exiel se lo toma todo tranqui, pero Ramir no se queda atrás 😂💖

Saludos, Vivi.

Milton y RamirWaar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu