cristian y mara se conocen gracias al hermano de la última, nunca cruzaron más de dos palabras pero la tensión entre ambos era palpable. el casamiento de un amigo en común puede cambiar el rumbo de la vida de ambos.
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la última semana nos la pasamos discutiendo con cristian, él queria que viaje hacia argentina por los amistosos que iban a disputar y los festejos que se iban a realizar gracias al mundial.
por dentro me moría de ganas de estar a su lado y sabía perfectamente que si iba con lisandro alguna nos íbamos a mandar. si antes nos las ingeniabamos para estar juntos lo podíamos hacer otra vez, solamente que ahora miles de cámaras iban a seguir paso a paso de los jugadores. no me podía arriesgar, no me sentía preparada y el cordobes parecía no entenderlo.
- ¡miles de cámaras te van a estar enfocando, cris! no me gusta, no me siento cómoda. prefiero quedarme y que nadie tire comentarios malos hacia mi - dije ya harta de la situación, él se debía ir en un par de horas y continuaba con la esperanza de que vaya
en cierto punto me ponía triste porque obviamente quería estar ahí para él, también como quería estarlo para mi hermano, pero no podía superar esto que me estaba bloqueando.
- ¿así va a ser nuestra relación? yo solo en todo momento y vos acá encerrada porque tenes miedo - me contestó con la tonada cordobesa más marcada, le solía suceder cuando se enojaba
- por lo menos por ahora si, antes de que empecemos esto te dije que no estaba lista para que todos lo sepan
quería llorar, sentía que la situación se me estaba saliendo de las manos. no podía controlar nada de lo que estaba pasando y eso me estaba matando.
- ¿no estas lista o no queres? ya lo saben todos, mara, no son boludos pero vos queres seguir en esta burbuja
no supe que responder, me quedé muda. en parte sabía que tenía razón, era obvio lo que nosotros dos teníamos. estábamos juntos en todo momento, las fotos que subíamos, el video que salió hacia una semana en nuestra salida al bar.
- ¿me equivoco? - preguntó viendo que no respondía, ambos sabíamos que estaba diciendo la verdad solo que yo no quería verlo
otra vez el silencio reinó en la sala. indirectamente estaba dando la respuesta y él lo sabía. temía que el punto en el que estábamos no tuviera retorno, me negaba a no tenerlo en mi vida pero siempre que quería dar un paso más algo me frenaba.
cristian agarró las pocas cosas que tenia en mi casa que necesitaba llevarse hacia argentina.
- ni quiero que te vayas así - dije aguantando las lágrimas, no tenía fuerzas ya, sentía que me desmoronaba
la mirada en sus ojos pareció suavizarse, sus cejas ya no estaban tan fruncidas como antes. se acercó hacia mi para acariciar mis mejillas, al sentir su tacto mis ojos se cerraron automáticamente permitiendo que algunas lágrimas salieran.
- pensamos distinto, mara. capaz es mejor que dejemos todo para hablarlo cuando vuelva así tenemos tiempo para pensar sobre lo que queremos en frío
no me dejó responder que me dio un beso en la frente y se fue. me sentía desorientada, no sabia como arreglar aquello que sabia que estaba yo misma había ocasionado.
