cristian y mara se conocen gracias al hermano de la última, nunca cruzaron más de dos palabras pero la tensión entre ambos era palpable. el casamiento de un amigo en común puede cambiar el rumbo de la vida de ambos.
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las fiestas habían llegado, una vez más las pasabamos juntos, aunque ahora si éramos pareja, no estábamos a las escondidas y estábamos esperando un hijo juntos.
tomamos la decisión de pasarlo junto a lisandro acá en inglaterra, más que nada porque ellos estaban en plena temporada y viajar era demasiado quilombo, no era como el año pasado que estaban todavia desafectados por haber ganado el mundial, ahora debían cumplir si o si. aunque otro factor intervenía en viajar en avión, mi embarazo estaba entrando ya en el séptimo mes, más bien terminandolo y preferíamos evitar ese tipo de viajes.
ibamos a ser nosotros dos, junto a lisandro y muriel, porque a valen le tocaba este año navidad con karen por lo que para año nuevo si ibamos a estar los tres juntos. me moría de ganas de pasar mi primer año nuevo como familia.
me encontraba frustrada tirada en la cama observando los miles de vestidos que me quedaban a la perfección ya que eran enormes pero que no eran del todo mi agrado, con cristian finalmente habíamos tomado la decisión de seguir manteniendo mi embarazo en secreto.
- ¿qué pasa gorda? - preguntó cristian, quien había entrado en nuestra habitación en algún momento donde yo estaba perdida en mi propia cabeza, sentandose en el pequeño espacio libre que quedaba en la cama
- odio estos vestidos, te juro que no los puedo ver más. siento que me hacen más grande de lo que estoy - dije posando una mano sobre mi panza descubierta, la calefacción estaba al maximo por lo que me permitía andar lo más ligera de ropa posible
cristian se acomodó como pudo más cerca mio y apoyó su cabeza al lado de la mia y su mano sobre la mia, que continuaba apoyada encima de mi panza.
- justo de eso te queria hablar, estaba pensando y capaz ya es momento de que digamos que estamos esperando un hijo, vos queres usar la ropa con la que te sentis más cómoda y no es justo que te quieras tapar - dijo en un tono calmo, el cual siempre utilizaba al hablarme
- ¿decis? no quiero que nos rompan los huevos como antes, no quiero que nuestra hija pase por esto - respondí girando mi cabeza para poder mirarlo a los ojos
- y no lo va a hacer, ya nadie habla de alguna polémica nuestra, tampoco las generamos, vamos a estar bien los cuatro y cuántos más decidamos tener
- estas loco si pensas que después de este embarazo voy a tener más hijos - dije incorporandome de a poco para poder sentarme en la cama, claramente cristian me tuvo que ayudar porque sola no podía
gracias al embarazo me dolía todo, la espalda baja, los pies, las piernas en si, la cabeza. me la pasaba cansada todo el día. aun así no me arrepentía de nada, cada día que pasaba deseaba que llegara el momento en el que por fin tuviera a mi hija en brazos.
- decís eso ahora, vamos a ver unos años después la tengas a oli - cotinuó insistiendo mientras me observaba guardar las prendas en el placard
- vamos a ver si vos pensas lo mismo después de que nazca y te haga cambiar todos los pañales a vos solo
