Capitulo 26.

18 3 0
                                    


Un viaje que nunca tuvo que acabar.

Briana.

-Le será mejor recuperarse en el campo, concuerdo contigo Nathaniel- el psicólogo voltea hacia mi, tiene su block de notas y un bolígrafo en sus manos- Briana, felicidades por el gran paso que diste, te felicito-

-Gracias- sonrió un poco y Nate lo despide en la puerta.

-Bien hagamos la mochila nena-me levanto del sofá cansada emocionalmente despues de la terapia, logre abrirme un poco mas y me felicito por eso.

Casi una hora pasa para que podamos hacer una mochila, me pregunte por que mochila y no maleta y Nate me dijo que confiara en el.

Meto dos neceseres de color beige a la gran mochila junto con un pijama y dos cambios de ropa igual que Nate, este va de su departamento al mio echando cosas. Nate tarda de mas y aprovecho para esconder una de las armas para sentirme mas segura y confiada.

-Lleva mas cambios de ropa, aun hay espacio-

Hago lo que me pide y aprovecho un tiempo para despedirme de Celia, le pido que Daniel se quede el tiempo que estaré fuera y esta acepta a regañadientes, oficialmente ya tiene ocho meses de embarazo y es probable que de a luz pronto.

Me preocupo y llamo a Daniel pidiéndole que venga, Nate y yo esperamos a que llegue.

-Cuídala por favor- le pido.

-Lo hare, ustedes también cuídense-

Nate pide el ascensor con la mochila sobre su hombro, en el se ve tan diminuta pero en mi cubre casi todo mi torso, me rio por eso.

-¿Que pasa?- me ve con una sonrisa.

-Que eres un grandulón-

-Y así te gusto- 

-Mucho- sonreímos ambos y esta sensación de mariposas revoloteando dentro de mi no desaparece.

Subimos al ascensor y bajamos al estacionamiento, poso mi mano sobre la perilla del carro y no abre.

-¿Nate?- volteo a verlo para que quite el seguro.

-No iremos ahí- esta junto a su nueva moto.

-Yo nunca he estado en una moto, prefiero el carro. Mama dice que son peligrosas- sueno como una niña pequeña pero le creo a mi madre.

-Son peligrosas para idiotas que no saben utilizarlas, para mi no- hace una pausa reparando mi gesto- estarás bien, eres mas fuerte de lo que crees nena-

Sostiene la mochila y yo paso ambos brazos por los huecos, me mira y sus ojos están llenos de fuerza que yo necesito.

-¿Estas seguro?- asiente con firmeza.

Pasa por mi lado hasta la moto con la cabeza bien alta, incluso aunque yo tenga todo el miedo del mundo.

-Absolutamente- lo veo palmear el asiento de la moto.

Parece estar bien, cómodo así que me acomodo pasando mi pierna quedando sentada en el asiento.

-Te prometo que conduciré con cuidado sobre todo si vas tu detrás... jamás te haría daño con nada-

-Lo se amor, confió en ti-

Me coloca un casco negro y luego se pone el suyo. Sube y enciende el motor, me hecho hasta adelante dejando mi pecho pegado a su espalda y que mis pantorrillas toquen las suyas. Lo rodeo con mis brazos por su cintura y apoyo mi cabeza en su espalda como si fuera un koala.

Devoto.(+21)Where stories live. Discover now